De Bruyne y Gundogan devuelven al City a la cima de la clasificación
CUANDO ha pasado casi 120 días mirando por encima del hombro al resto, no renuncia fácilmente al primer puesto.
El Manchester City tuvo que sentarse y ver al Liverpool asumir el liderazgo de Prem durante el saque inicial a la hora del almuerzo en Anfield.
Pero Pep Guardiola dijo el viernes que no tendría ningún efecto en su equipo si eso sucediera, y tenía razón.
Al City le tomó solo cinco minutos regresar efectivamente a la cima a través del primer partido bellamente trabajado de Kevin De Bruyne.
Y cuando Ilkay Gundogan remató de volea con estilo 20 minutos después, no había duda de que se restablecería el statu quo.
Significa que los campeones llegan al duelo titánico del próximo domingo con los Rojos con la ventaja, aunque sea por un pequeño punto.
Jurgen Klopp había probado los juegos mentales durante su conferencia de prensa del viernes, alegando que no le gustaría un viaje a Burnley en este momento.
Claramente, el jefe de Kop no había estudiado el libro de formularios, ni las reuniones anteriores entre estos dos equipos.
Porque el City había ganado sus últimos nueve contra los hombres de Sean Dyche en todas las competiciones, con un marcador global de 32-1.
Y el descenso amenazaba Los Clarets habían perdido sus últimos tres partidos -antes de un parón forzoso de tres semanas- sin marcar en ninguno de ellos.
Para ser justos, los campeones de Guardiola habían cometido un desliz ya que solo lograron un empate sin goles en Crystal Palace en su último partido Prem.
Fue en diciembre de 2020 la última vez que perdieron puntos en partidos de liga consecutivos, y sabían que no podían permitir que eso volviera a suceder.
Hubo un susto temprano cuando el fanático de la infancia del City, Josh Brownhill, recibió un cabezazo temprano en el que pasó por encima de Ederson pero se desvió por poco.
Sin embargo, eso fue lo mejor de la tarde para los hombres de Sean Dyche.
En el minuto cinco los laterales Kyle Walker y Joao Cancelo estiraron la jugada antes de que Rodri rematara un centro al segundo palo.
Raheem Sterling amortiguó un pase de volea perfectamente en el camino de De Bruyne, quien envió un tiro a través de Nick Pope y en la esquina superior.
KDB tuvo la oportunidad de levantarse durante el receso internacional ya que no fue convocado por el jefe de su equipo nacional, Roberto Martínez.
Pareció haber valido la pena, ya que estuvo en todas partes desde el principio: cortar una pelota para que Rodri picara las palmas de Pope con un martillo de largo alcance.
El centrocampista español tuvo mala suerte allí, pero debería haberlo hecho mejor minutos después cuando Burnley no despejó un córner, pero atrapó su volea y disparó desviado desde 12 yardas.
El delantero local Wout Weghorst estaba claramente frustrado por la forma en que iban las cosas y lanzó un brazo hacia la garganta de Cancelo.
La tarjeta era amarilla, pero Cancelo se recuperó al participar en el segundo gol en el minuto 25 con un balón desviado por la derecha.
Sterling jugó un encantador uno-dos con De Bruyne antes de irrumpir por la banda derecha y lanzar un balón al medio.
Ilkay Gundogan llegó justo en el momento justo y guió su volea a través de las piernas de Kevin Long y pasó a Pope.
Long, de 31 años, estaba haciendo su primera apertura en cualquier competencia esta temporada con Ben Mee lesionado y Nathan Collins suspendido. Qué juego para venir.
Un tercer gol casi llega justo antes del descanso cuando Phil Foden levantó un delicioso balón por arriba en el camino de Sterling, quien llegó allí por delante de Pope pero volea desviado.
El portero de los Giant Clarets, Pope, dijo que el capitán suplente de los Three Lions no estaba contento con él por estar a su lado en la alineación en Wembley el martes.
Se elevó más de 5 pies y 7 pulgadas en libras esterlinas esa noche, pero aquí City había estado muy por encima de los Clarets en todos los niveles en la primera mitad.
Burnley lanzó al delantero marfileño Maxwel Cornet para el reinicio, y eso podría haber enviado un escalofrío por la columna vertebral de Guardiola.
Marcó cuatro goles en tres partidos de la Liga de Campeones contra el City para su antiguo club, el Lyon, incluido uno clave en los cuartos de final de 2020.
Nathan Ake despejó su cabezazo fuera de la línea, aunque es casi seguro que se habría descartado por fuera de juego.
Al menos dio un poco de aliento al equipo local, incluso si el City siempre parecía una amenaza cada vez que atacaba.
De Bruyne se abrió paso por la derecha y retrocedió para Gundogan, pero esta vez Pope pudo salvar.
La fuerza de ataque de los "Tres Leones" de Guardiola de Sterling, Foden y Jack Grealish claramente se había divertido, pero justo después de la hora los separó y envió a Gabriel Jesus por Foden.
El brasileño estuvo a punto de conseguir el tercero cuando se estiró para llegar al final de un centro de Sterling desde la derecha pero no pudo contener su esfuerzo.
Esta carrera por el título está tan reñida que podría reducirse a la diferencia de goles. Guardiola esperará que su equipo no se arrepienta de no marcar más aquí.
