Arsenal perdía por 3 a 0 pero rescató un 3 a 3 contra Godoy Cruz y pasó de todo: dos expulsiones, el VAR y ¡una chilena! para sellar el resultado
En Sarandí, se creó una obra maestra del suspenso y del choque de estilos; el Tomba pudo golear, en un encuentro que se recordará por mucho tiempo
Fue un auténtico choque de estilos, de principio a fin. Arsenal suele tener una estructura equilibrada, sin excesos en el ataque. Un sello distintivo del historial de Leonardo Madelón. Godoy Cruz, en cambio, es una formación a imagen y semejanza de Marcelo Bielsa: Diego Flores, el conductor, fue colaborador del Loco años atrás. Y así se jugó el partido: con la templanza del equipo local, con la voracidad del conjunto visitante.
Compacto de Arsenal 3 vs. Godoy Cruz 3
Entretenido, cambiante, con el Tomba al mando de la situación en buena parte del espectáculo, el desarrollo tuvo intensidad en casi todo momento. Un placer visual para el espectador imparcial. Lógica de un lado, profundidad, del otro. Y pelota parada, todo un símbolo para una formación con otros ideales. Córner de Ojeda, cabezazo furioso de Ferrari.
Al rato, Godoy Cruz estableció una diferencia mayor. Ramírez creó una jugada por la izquierda con atributos de crack y lanzó un centro perfecto, para la zurda de Ojeda, de primera, a la red. El balón rozó tímidamente en Lucas Suárez y cambió, en parte, la trayectoria hacia el gol.
Arsenal reaccionó, pero lejos del impulso que mostró en la Bombonera. Godoy Cruz se desató. Ojeda, Bullaude y Ramírez corrían como flechas, cerca estuvo el elenco mendocino de marcar el tercero. En el final del primer tiempo, ocurrió una curiosidad. El VAR tomó protagonismo: llamó a Nazareno Arasa, el árbitro, por un caso de “confusión de identidad”. Una infracción sobre Lomónaco provocó una tarjeta amarilla, que el juez mostró a Abrego. “¿Por qué yo?”, preguntó el jugador. En realidad, es una consulta clásica de los futbolistas a los jueces. La tecnología respaldó al volante: la tarjeta cambió de identidad, pasó a ser propiedad de Ortiz, el zaguero. La resolución duró unos dos minutos.
Madelón pateó el tablero en la segunda mitad: dispuso de tres ingresos, desde el arranque. Navas, Colman y Machado respaldaron una postura más agresiva de Arsenal. Sin embargo, la expulsión de Suárez complicó el panorama para un equipo sin ideas audaces.
Y Godoy Cruz se aprovechó: Ortiz capitalizó con éxito un tiro libre de Ojeda, un 3-0 lógico, aunque con la curiosidad de que el Tomba se impuso con la prepotencia del laboratorio.
Enorme suspenso tuvo el tramo final. Ortiz pasó de goleador a expulsado: cometió una imprudencia sobre Colman, en el área. Lomónaco, de penal, creó el primer descuento. Kruspzky, de cabeza, capitalizó un centro de Brochero. Faltaban 15 minutos: podía pasar cualquier cosa. Hubo múltiples emociones hasta el final. Hasta que a tres minutos del cierre, con una ¡chilena!, Ignacio Gariglio selló el increíble 3 a 3. Viva el fútbol.des.