Al Madrid no le preocupa la situación con Mbappé
Desde el pasado 1 de enero, fecha en la que Kylian quedó libre para negociar con otros clubes, lo único nuevo que ha pasado es que Mbappé ha rechazado otras dos ofertas de renovación del PSG, que le ha ofrecido un cheque en blanco a cambio de seguir dos temporadas más en París. Mbappé aceptó ir al Madrid en agosto pasado y no ha cambiado de idea. En Chamartín están tranquilos porque tienen el convencimiento pleno de que la estrella francesa no cambiará de idea, como tampoco su abogada y representante, Delphine Verheyden.
Se ha dicho que el acuerdo con el jugador se cerró el pasado 30 de enero con dos directivos del Real Madrid, el ingeniero de Caminos Pedro López Jiménez y el abogado del Estado José Luis del Valle. Pero no fue así, como este periódico ha contrastado con fuentes de máxima solvencia dentro del club. Ninguno de los dos, ni López Jiménez ni Del Valle, tienen poderes para hacer fichajes en el Real Madrid. La firma para estos asuntos sólo la tienen dos personas: el presidente, Florentino Pérez, y el director general del club, José Ángel Sánchez.
Quedan sólo ocho jornadas para que concluya la temporada en Francia y hasta que eso suceda es normal que Mbappé se muestre tibio en sus declaraciones. No hay razón alguna para anticipar movimientos que sólo le pueden acarrear problemas y pitos desde la grada. Eso no quiere decir que durante los últimos meses no haya surgido alguna dificultad en la 'Operación Mbappé'. Pero más que por el futbolista, es por su madre, Fayza Lamari. La señora Lamari es ambiciosa y nunca se cansa de exigir en nombre de su hijo. Pero Kylian ya ha demostrado que su prioridad no es el dinero. De serlo, hace tiempo que habría renovado por el PSG. La ilusión de Mbappé es convertirse durante muchos años (de momento por lo menos seis) en el jugador-franquicia del Real Madrid.