A cara o cruz en el Camp Nou
Por tanto, el partido de esta noche contra el Eintracht de Frankfurt en el Camp Nou (21.00 horas, Movistar Liga de Campeones) se adivina como una nueva final (sigue el encuentro en directo en As.com). Y esta vez, sin margen de reacción, tal y como pasó en las vueltas de las eliminatorias anteriores ante Nápoles y Galatasaray.
En esas ocasiones, el Barcelona tuvo que ganarse el pase a la siguiente ronda en la vuelta. La novedad, respecto a cruces anteriores, es que lo tuvo que hacer a domicilio: ganando en Nápoles y en Estambul y que esta vez el partido decisivo se juega en el Camp Nou. Pero no deja de ser un reto apasionante.
Llega el Barça a esta cita después de encadenar dos partidos tras el parón de selecciones que acabaron mejor de lo que el juego podía indicar. Tras golear al Real Madrid en el Bernabéu por 0-4, el equipo de Xavi regresó tras el parón de selecciones con problemas en su juego. Salvó el partido de ida en Frankfurt con un empate a uno que no reflejó la superioridad alemana en el Deutsche Bank Park y el domingo venció in extremis al Levante. Nadie le niega a los catalanes la capacidad competitiva que se traduce en una racha espectacular, pero ha perdido la exquisitez del juego mostrado en Chamartín.
Posesión. Analizado el partido de ida, Xavi mantiene que el problema del Barcelona fue futbolístico. Habla el entrenador blaugrana de que faltó "pulcritud" en la salida de balón. Por eso, lo más probable es que esta noche el técnico disponga a su mejor once sin rotaciones.
La única baja respecto al equipo de las grandes ocasiones, más allá de la ausencia de Alves, que no está inscrito, es la duda respecto a Piqué, que quiere llegar a tiempo al partido, pero que sigue teniendo dolencias en el aductor.