Vuelve Haaland, vuelve la alegría
El delantero volvió a jugar después de dos meses de baja por una rotura de fibras. Todos sus compañeros le buscaban. Había vuelto el referente. Dejó destellos.
El arranque del partido fue para el Arminia, acercándose con cierto peligro al marco protegido por Kobel sin desprender demasiado peligro. Un disparo al palo de Malen fue prueba de la pegada de los locales incluso cuando no llevan el peso de los partidos, algo que fue cambiando según fueron pasando los minutos y tuvo su recompensa en un tanto de Wolf a centro de Hazard. Sin brillar en demasía, sobre todo en la construcción, pudo ampliar la renta en otro disparo de Wolf que Ortega desbarató magistralmente.
La segunda mitad fue más física que la primera, pero el Borussia, otra vez por medio de Malen, volvió a toparse con el aluminio. Sin embargo, el momento más esperado por la afición local llegó en el 62 de partido. Tras dos meses de baja, Haaland, ya recuperado de su rotura de fibras, saltó al césped del Signal Iduna Park sustituyendo a Malen arriba. Todos sus compañeros le buscaban. Había vuelto el referente. El kíller. Con él sobre el verde, el BVB era otro. Más confiado. Más letal. Pudo marcar, pero Ortega paró. Aun así, dejó destellos. Como siempre. Ha vuelto.