Un derbi "para la paz" y sin goles
Una descafeinada semifinal copera de ida entre Milan e Inter acaba 0-0. Los rossoneri crearon más peligro y tienen la ventaja de no haber encajado goles en casa.
El guion no cambió en la segunda mitad, en la que el Milan siguió sumando ocasiones sobre todo desde las bandas, con Leao, Saelemaekers y Theo, pero sin sorprender nunca a Handanovic. Pioli, además, en los últimos 20 minutos decidió pensar también en el partidazo del domingo ante el Nápoles, dándole descanso a sus dos extremos y a Krunic. Al Inter no pareció preocuparle demasiado encadenar su quinto partido seguido sin victorias y el cuarto sin meter goles. Los nerazzurri no aumentaron nunca su ritmo y la única buena noticia de su noche fue el estreno de Robin Gosens, que saltó al campo en el 88'. El 0-0, de todos modos, hace más feliz al Milan, que con un empate con goles en abril conquistaría la final. Serán los últimos tantos de visitante que tendrán este poder en Italia.