¿Por qué le salen burbujas a un vaso o una botella de agua en reposo?
El agua libera el nitrógeno y el oxígeno en forma de burbujas cuando la temperatura del líquido comienza a calentarse y a adoptar la del ambiente.
Según señala La Sexta, haber dejado el agua en reposo olvidada no es la razón del cambio, sino la temperatura a la que se expone el agua. Cuando servimos agua en un vaso el agua suele estar más fría que el ambiente, pero esta va aumentando su temperatura con el paso del tiempo.
Al aumentar su temperatura, el agua libera el nitrógeno y el oxígeno en forma de burbujas. Algunas se quedan en las paredes del vaso, pero otras suben hasta la superficie y desaparecen. Como depende de la temperatura, si dejásemos el vaso de agua en la nevera las burbujas no aparecen.
Un ejemplo práctico: si ponemos agua a hervir, vemos como en el fondo del cazo comienzan a aparecer burbujas de gas que después suben a la superficie y acaban desapareciendo. Todo esto se debe al cambio de temperatura que sufre el agua.
Presión atmosférica y sabor
Pero la presión atmosférica también participa en este fenómeno. Cuando la temperatura del agua va aumentando y adaptándose a la del ambiente, la presión atmosférica sobre el agua disminuye, se rompe el equilibrio que retiene los gases y permite la liberación del nitrógeno y del oxígeno.
¿Por qué cambia también el sabor? El agua recién servida contiene más oxígeno y al perderse este cambia el sabor. Además, al dejar un vaso de agua destapado, favorecemos la entrada de polvo o de otras sustancias.