Grosero error de Donnarumma y la debacle del PSG
Benzema generó la macana del arquero italiano para el 1-1 que fue el principio del fin del Paris en la Champions.
Un terrible error que le costó caro, carísimo al PSG, que tenía la serie controlada y, de repente, todo se le complicó. Gianluigi Donnarumma recibió un pase atrás cómodo, la frenó, quiso salir jugando con la pelota en los pies, Karim Benzema presionó la salida (como intentó hacerlo durante todo el partido) y provocó la macana del arquero italiano, que cuando buscó pasar la bocha ya era tarde: el francés lo atoró, la bola le quedó a Vinicius, éste metió un pase atrás al goleador y con un toque puso el empate 1-1 del Real Madrid.
Pochettino reclamó luego de la debacle una falta al arquero, que ni reclamó: pudo haber habido falta por la pierna fuerte, pero desde el VAR no lo vieron así. Igual, en caso de alguna duda, es una jugada de interpretación, el juez español no vio falta sino que Benzema puso la pierna.
Fue el inicio de la debacle del equipo de Mauricio Pochettino. A partir de ese inentendible error del arquero italiano todo cambió. PSG perdió la pelota, y con ella el dominio del partido, y se sumergió en un mar de dudas que Real Madrid capitalizó para darle vuelta una serie que daba la sensación de estar cerrada, amén de lo corto del resultado.
Hubo desatenciones de todo tipo. Posicionales y en el seguimiento de la marca. En la primera y en la segunda jugada. Una invitación especial para que Benzema se diera la panzada que se dio y se convirtiera en el héroe de la noche madrileña, marcando los tres goles que le valieron el pase a cuartos.
Sería injusto que todo recaiga en Donnarumma, puesto que hubo errores groseros en la línea defensiva, incluyendo la inexplicable desatención que le costó el 3-1 a segundos de haber sacado del medio. Sin embargo, no se puede tampoco pasar por alto que la macana del arquero del seleccionado azzurro desencadenó las dudas grupales que terminaron dejando a PSG afuera de la competencia.
