Gerard y Pau marcan el penalti de Riquelme en Turín
El Villarreal golea a la Juventus en el tramo final del partido y pasa a cuartos deslumbrando a toda Europa. Un soberbio Rulli mantuvo a su equipo en el partido en la primera mitad.
Antes hubo que sufrir. Rulli frenó a paradones al huracán Vlahovic, uno de los delanteros del momento. Pero el plan le salió perfecto esta vez a Emery. Mandó a Coquelin y, sobre todo, Gerard, al césped en el momento de la verdad. Y uno forzó el penalti y el otro lo convirtió. El Villarreal está entre los ocho mejores de Europa, el tercer español en conseguirlo.
Los dos estuvieron cerca del gol en la primera mitad. Aunque cierto es que la Juventus tuvo las más claras, siempre con Vlahovic en el centro de todo, como si llevara 20 años jugando en la Champions y toda la vida en un club tan grande como la Juve. Pero Rulli, el héroe de la Europa League, le mantuvo el ten con ten. Kryptonita argentina contra el supermán serbio.
Vlahovic estaba desatado. Un desmarque vertiginoso al primer palo, trufado con un remate con la zurda cruzado parecía que iba a tumbar a Rulli. Pero esta vez un travesaño fabricado en Buenos Aires salió al auxilio del Submarino. La Juve arreciaba la portería amarilla pero el Villarreal aguantaba con temple, intentando enfriar la caldera con posesiones largas y, de paso, encontrar las grietas en un centro del campo blanquinegro, con Arthur y Locatelli, algo endeble.
El frenesí de la primera mitad se tornó en cordura en la segunda. El Villarreal dio un paso atrás. Pero precisamente en ese posicionamiento sufrió mucho menos. La Juve tenía posesiones largas pero solo asustaba a Rulli desde tiros lejanos. Uno de Rabiot lo detuvo de puños Rulli, blocando en dos tiempos.
El reloj corría y Emery fue colocando sus piezas sobre el tablero para dibujar su jaque mate. Primero Coquelin, después Gerard. El francés peleó y le hicieron penalti. Un penalti que el árbitro no vio y tuvo que salir el VAR al rescate. Gerard lo convirtió. Quedaban 13 minutos y, con Dybala y Bernardeschi, se preveía que la Juve apretaría. Pero no. Pau Torres acabó de rematar a la Juve y desde ahí todo fue una fiesta. Tanto que en el descuento llegó el segundo penalti. Danjuma completó la goleada.