Darío Benedetto está lesionado y nadie garantiza su presencia ante River: el N° 9 es, apenas, uno de los interrogantes en Boca
Según informaron desde el club, el delantero sufre una sobrecarga en el músculo peroneo de su pierna derecha, algo que lo margina del choque con Estudiantes; de cara al superclásico, crecen las dudas por el mal rendimiento del equipo
La molestia muscular que Darío Benedetto sintió en la activación del sábado, previa al partido con Huracán (que finalizó en derrota de Boca por 1-0) y que tampoco le había permitido entrenarse con normalidad el jueves pasado, es algo que siguen de cerca.
El resultado de los estudios que el delantero se realizó ayer mismo determinarán la gravedad del cuadro. Según pudo averiguar LA NACION, el problema está en el músculo peroneo de su pierna derecha, cerca del sóleo. Pero que, a diferencia de lo que trascendió, no es un desgarro, sino una sobrecarga producida por unas plantillas deportivas que utiliza el Pipa al entrenarse.
Por esa molestia que siente el delantero en cada entrenamiento y en los partidos, es un hecho que no estará disponible ante Estudiantes. Algunos descuentan que dirá presente en el Superclásico en Núñez, aunque teniendo en cuenta antecedentes cercanos hay que ser cautos. Más todavía si no hubo parte médico oficial.
El flojo nivel de Boca ante Huracán
Sin embargo, ese es apenas uno de los temas que preocupan a Boca. A la ausencia del Pipa ante el Pincha se le suma a Sebastián Battaglia otro escenario endeble: el equipo no viene jugando bien. Aun cuando los resultados lo acompañaron (ante Huracán cortó una racha de 11 partidos sin derrotas), su funcionamiento dista de ser el ideal.
Los intérpretes padecen constantes altibajos en sus actuaciones. Cuando no se distrae la defensa, se relaja el mediocampo o tienen mala puntería en el frente de ataque. Y eso el rival de turno lo aprovecha.
En el caso del Globo, pareció un ejemplo visual de la Ley de Murphy: “Todo lo que podrá salir mal, saldrá mal”. Matías Cóccaro se cansó de ganar en cada centro que cayó en el área xeneize. Hubo una muy mala noche de Rojo (central izquierdo) y Sandez (lateral izquierdo), razón por la cual el equipo de Parque Patricios priorizó la presión y el ataque por ese costado. La jerarquía de Oscar Romero y el despliegue de Pol Fernández no fueron suficientes para asociarse colectivamente con el resto. Y mientras Sebastián Villa volvió a priorizar su individualidad en detrimento de la jugada en equipo, Nicolás Orsini tuvo muy pocas oportunidades de anotar, y en la más clara, falló.
Pero hay más. Porque los próximos dos rivales son complicados en cualquier contexto. Con un juego eficaz y contundente, Estudiantes tuvo un comienzo perfecto (ganó en las primeras cuatro fechas). Y ayer rescató un empate 1 a 1 en su visita a Vélez en Liniers, en donde mostró temple ante la adversidad.
La presencia de Ricardo Zielinski es sinónimo de trabajo y compromiso. Y así como lo hizo en Belgrano y Atlético Tucumán, entre otros clubes, en el club pincharrata pareciera haber encontrado el lugar ideal para desarrollar su idea.
Si Estudiantes, su muy buen presente y la experiencia de su entrenador ya de por sí imponen respeto, lo mismo aplica para el River de Gallardo, que después de casi ocho años de trabajo tiene bien clara cuál es su identidad futbolística.
Fueron llamativas las palabras de Battaglia en relación a Benedetto. “Tuvo un día difícil porque falleció su abuela. Así que veremos cómo seguirá en la semana”, resumió el técnico en la conferencia de prensa posterior al tropiezo frente al Globo, en la Bombonera. De la molestia física, nada. Los próximos días determinarán si fue una estrategia para ocultar la hipotética lesión del goleador o realmente es una molestia que no reviste preocupación.
Benedetto se retiró de la concentración del equipo durante el mediodía del domingo para acompañar a su familia ante el fallecimiento de su abuela. Su lugar en el equipo lo ocupó Nicolás Orsini. Sin embargo, al delantero se lo vio en un palco, viendo el partido. Al menos, curioso.
El plantel de Boca tuvo hoy el día libre y recién se reencontrará este martes en Ezeiza. Allí comenzará la rehabilitación del Pipa y también se evaluará cómo está Marcos Rojo, que quedó muy dolorido de su rodilla derecha. Pero antes del trabajo también habrá una charla cara a cara entre el DT y su plantel, para repasar juntos los porqué de la tan floja actuación ante Huracán y sobre todo, encontrar respuestas.