Cuéllar pide al TSE anular su expulsión y apunta a García Linera, Quintana y Romero

La Paz, Erbol 

El diputado suplente del Movimiento Al Socialismo (MAS), Rolando Enríquez Cuéllar, reveló anoche que pidió al Tribunal Supremo Electoral (TSE) la anulación de la resolución de expulsión que la comisión de ética de su partido emitió en su contra; además, aseguró que tras esta decisión están los exministros Juan Ramón Quintana, Carlos Romero y el exvicepresidente Álvaro García. "Carlos Romero, Juan Ramón Quintana y Álvaro García Linera no representan a nadie", enfatizó el legislador y agregó: "Los exministros forman parte de la expulsión de Rolando Cuéllar, eso he informado al Presidente (Luis Arce), es lamentable que no tengan respeto, no queremos a esa vieja rosca que le hizo daño", sostuvo en el programa Noches Sin Tregua.

Enríquez Cuéllar se reunió la tarde de ayer con su bancada de Santa Cruz y el Presidente Luis Arce. El encuentro permitió acordar un plan de trabajo y entrega de obras. Además, aseguró que tiene la confianza del mandatario.

"Estamos pidiendo al Tribunal Electoral que anule esta resolución de expulsión porque no tiene argumento legal, (el estatuto) orgánico lamentablemente han pisoteado", enfatizó el diputado.

Cuéllar afirmó que no va a renunciar a su curul y sólo mediante referéndum se podrá activar este mecanismo de salida.

"Que sepa esa vieja rosca que un artículo del estatuto del MAS no puede estar por encima de mi mandato", resaltó el legislador.

El asambleísta precisó que planteó al TSE una acción de cumplimiento para que esta institución responda al pedido de las dos regionales del MAS sobre un nuevo congreso para el cambio de representantes en el partido.

La Dirección Nacional del MAS expulsó a Rolando Enríquez Cuéllar con ignominia, porque cuestionó al jefe del partido, Evo Morales, y pidió renovación. La dirección nacional exige el curul de Enríquez Cuéllar al Tribunal Supremo Electoral.

El jefe del MAS y líder de las seis federaciones de productores se coca del Chapare negó alguna división interna del partido gobernante, pero aseguró que "hay traidores".