Una joven muere al saltar de un trufi en movimiento porque el chofer le dijo que iban a chocar
Liliana Heredia tenía 24 años y el lunes se dirigía a la universidad para retirar su título de licenciada en Administración de Empresas.
La joven iba a hacer esos trámites en compañía de Miguel, su pareja, con quien tenía un hijo de cinco años. Su familia relató que no quiso casarse hasta terminar sus estudios, y así lo hizo.
A mediodía del lunes, ambos abordaron un taxitrufi de la línea 109, al que comenzaron a fallarle los frenos en la avenida Kapac Yupanqui.
El padre de Liliana contó que el conductor del vehículo de servicio público les dijo que salten del motorizado porque se había quedado sin frenos e iban a estrellarse.
De los tres ocupantes, sólo Liliana perdió la vida. Miguel también se lanzó del vehículo en movimiento, pero terminó con dos fracturas: una de cráneo y otra de clavícula. En cambio, Liliana se golpeó la cabeza y murió.
El motorizado nunca se estrelló, ya que el chofer dijo que logró "recuperar" los frenos y detuvo su marcha cuatro cuadras después del lugar donde ocurrió la tragedia.
Sin licencia, sin inspección y sin dinero
El conductor del motorizado de servicio público fue detenido y ahora está acusado de homicidio culposo, causa por la cual será sometido a audiencia cautelar este miércoles.
La Policía comprobó que tenía su licencia caducada desde hace un año y no se había presentado a hacer la inspección técnica vehicular.
La Unidad Operativa de Tránsito continúa con las investigaciones con peritos especializados que revisarán el vehículo y convocó al mecánico del chofer.
"Previamente se está convocando al mecánico que supuestamente habría revisado el trufi", informó el jefe de la División de Accidentes, Rolando Vera, según reporte de Red Uno.
Los restos de Liliana son velados desde ayer y será enterrada este miércoles. Era la única hija de sus padres y dejó a su hijo en la orfandad, reportó el periodista Diego Viamont.
Miguel fue sometido a dos cirugías en el Hospital Univalle y recibirá el alta mañana, si su evolución es favorable.
"Ambas cirugías han sido con buena evolución. El paciente está despierto, hablando. Esperemos que no tenga secuelas", indicó al mismo medio televisivo el traumatólogo Christian Rivera.
La familia de Miguel necesita ayuda para cubrir los servicios de la clínica y la compra de medicamentos. Por eso empezaron una campaña de recolección de dinero.