OSASUNA 0-SEVILLA 0 / Herrera amarga al aspirante
Un penalti detenido por el portero de Osasuna a lanzamiento de Rakitic impide al Sevilla ponerse a un punto del líder Madrid. El equipo de Lopetegui tiró una hora de juego.
Osasuna veía en su choque ante el Sevilla una nueva oportunidad para tratar de sumar y seguir haciendo acopio de puntos que le den la permanencia lo antes posible. Conscientes de que les esperaba un partido complicado, Arrasate ya avisaba de que deberían buscar las pocas fisuras que presenta el equipo de Lopetegui. Y es que el conjunto andaluz ya ha mostrado su fortaleza y hasta hoy no ha dejado de dar muestras de que quiere perfilarse como serio aspirante a hacerse con el campeonato.
Martial se estrenó con el Sevilla como titular. Tiene potencia, pero ofreció poco acierto. El jugador número 255 en la era Monchi en el Pizjuán. El encuentro comenzó calmado, con el Sevilla como dueño del balón, pero los planes de Lopetegui se torcieron pronto, cuando en el minuto 6, Montiel se marchó lesionado. Le sustituyó un buen Tecatito. Ocampo se lesionó durante el calentamiento y fue Rakitic quien le sustituyó. El técnico sevillista se vio obligado a retocar el sistema, apostando por tres centrales. A los de Arrasate les costaba sacudirse la presión en un partido muy táctico y con un juego muy lento. Los rojillos poco a poco se fueron animando, en buena parte, gracias a la profundidad que aportaba Chimy y al gran esfuerzo de los navarros por presionar al rival en su área. En el minuto 29, Moncayola, con un gran disparo, obligó a lucirse a Bono y desviar a córner.
La falta de exposición del Sevilla y la ausencia de tiros a puerta, así como la escasa definición de los rojillos en las pocas ocasiones que tuvieron, hicieron que se llegara al descanso con el empate a cero. Lopetegui cambiaba y cambiaba sus piezas e incluso el sistema, la gente se mareaba con tanta permuta. y luego lo de pasar el balón entre centrales era soporífero. El Chimy percutió en banda.
En la reanudación, el Sevilla, a un ritmo muy lento, parecía cansado. necesitaba enlazar con la delantera. No sacaron un córner hasta el minuto 85. El Papu acertó en esa misión de tener algo de chicha en tres cuartos. Su entrada y la de Koundé fueron de lo mejor de la noche navarra. Por parte de Osasuna, Chimy Ávila, que ya lo había dado todo en la primera parte, lo intentó de falta sin fortuna. El Sevilla se dedicaba a tocar mucho el balón, pero sin generar peligro real. Las tornas cambiaron y el equipo de Lopetegui parecía tomar las riendas del partido. A Osasuna le tocaba sufrir. Los minutos pasaban, pero las ocasiones eran prácticamente inexistentes. Las fuerzas estaban bastante igualadas y los navarros defendían con mucho orden.
En el tiempo de descuento, Pizarro Gmez pitó un penalti cometido por Manu Sánchez tras revisar la pantalla. Koundé tocó el balón cuando el lateral rojillo iba a despejar y este le golpeó sin querer al tratar de despejar, aunque le dio en los tacos. Un impresionante Herrera paró el penalti de Rakitic. El Sevilla lo lamenta. El Madrid lo celebra.
