De Paul, en fase menguante
El argentino, tras la ilusión de los primeros meses, pasa un momento complicado, errático en el pase y con demasiadas pérdidas. El esperado tándem con Koke genera dudas.
Los números de De Paul en Barcelona fueron pobres, aunque en su cuenta queda el saque de esquina del segundo gol y un buen servicio a João. Fue el jugador que más balones perdió en el partido, 19. Contra el Valencia fueron otros 19, solo superado por Guedes (20), y ganó solo el 33% de sus duelos. Su acierto de pase en el Camp Nou se quedó en el 74% (solo Hermoso lo empeoró) y en la anterior jornada, en el 69%. Es cierto que sí hace envíos arriesgados, pero De Paul es mucho menos certero en las últimas semanas. Antes de la visita al Villarreal, su promedio era del 83%, con picos del 91% ante el propio Villarreal en la primera vuelta, la Real Sociedad (Liga) y el Betis. En La Cerámica se quedó en un 71% y en el Reale Arena, en Copa, en un 73%.
Vuelve Kondogbia, crece Herrera
El argentino sí convenció en las primeras semanas, cuando más difícil parecía hacerle hueco entre el tridente que conquistó la pasada Liga (Koke, Llorente y Lemar) y el auge de Kondogbia en el inicio del curso. Sus buenas actuaciones, unidas a que el francés ejerció de central y Llorente sigue haciendo de lateral, le abrieron un hueco y ya se puede decir que es un titular fijo. En las últimas semanas, el tándem Koke-De Paul transmite fragilidad e incapacidad para dominar mínimamente los partidos. Kondogbia, que partía como secundario, está de vuelta y Herrera quiere entrar en la competencia de lleno. Por eso a De Paul le toca volver a ser el de los primeros meses o, mejor aún, el de Argentina.