Atlético Mineiro prolonga su dominio en Brasil con la Supercopa
El Galo venció a Flamengo tras un 2-2 en los 90 minutos y una tanda de penales de 24 lanzamientos. El zaguero uruguayo vivió una tarde negra.
Durante el primer tiempo Flamengo llevó la iniciativa, fabricó más en ataque y acumuló mayor posesión. Además, la zaga funcionó bien y recuperaba la pelota con cierta soltura. Sin embargo, la ofensiva no estuvo acertada y erraron varios remates claros. Gabigol mandó fuera un mano a mano y el arco del equipo mineiro se mantuvo intacto. Además, el vigente campeón del Brasileirao golpeó con un disparo lejano de Arana que Hugo Souza dejó muerto para que convirtiese Nacho Fernández. El joven arquero que dejó en el banco a Diego Alves se repuso a lo largo del encuentro y dejó varias intervenciones de enorme valía.
Ataques desatados
Flamengo volvió del descanso con la intención de poner una marcha más en su ofensiva y lo consiguió con llegadas desde los costados y mayor movilidad de sus dos atacantes. Desde la izquierda surgió la acción del empate. Un buen pase al espacio de Filipe Luis lo sirvió De Arrascaeta al área y Gabigol culminó para olvidar su primer tiempo errático
Paulo Sousa movió el banquillo a media hora del final entró el joven Lázaro. En su primera intervención, el campeón del mundo Sub-17, arrancó con la pelota pegada al pie derecho y sirvió un maravilloso pase con el exterior hacia la llegada de Bruno Henrique, que superó en velocidad a Godín y batió por alto a Everson.
El Galo, a pesar de estos dos duros golpes recibidos, se fue a por el empate y generó un remate tras otro. Además, Mohamed también reaccionó de manera acertada. Entró a la cancha el chileno Vargas y al poco dejó de cabeza una pelota que Hulk transformó en el 2-2 tras un remate potente en el área.
Aunque en el cuarto de hora final los dos equipos contaron con acercamientos claros, poco a poco se impuso el temor a encajar y se priorizó el orden para no dejar escapar el título ya sin tiempo para reaccionar. Así llegó la tanda de penales donde la tensión fue máxima, primero con un acierto formidable y luego con errores y aciertos a partes iguales entre lanzadores y arqueros. Y así hasta un total de 24 lanzamientos. Finalmente la balanza cayó para el Galo, con el segundo lanzamiento anotado por Hulk y la parada definitiva de Everson.