El PSG no da tregua al Brest con un gran Mbappé

Los parisinos vencieron por 2-0 al Brest en un partido en el que Kylian Mbappé volvió a ser decisivo tras abrir la lata cuando peor estaban los de Pochettino.

Andrés Onrubia
EFE
Salvo hecatombe mayúscula, el PSG va a ganar con una holgada diferencia la Ligue 1. El conjunto parisino está encontrando poco a poco una versión mejorada de lo que ha sido desde el inicio de temporada. Hoy, contra el Brest, equipo que duró hasta el gol de Mbappé, el actual líder del campeonato francés volvió a vencer gracias al excelente talento individual del que dispone. Mbappé, como de costumbre, adelantó a su equipo con un fantástico tanto desde la frontal en la primera mitad. Kehrer, de forma sorprendente, sentenció el encuentro en la segunda parte. Ramos jugó 20 minutos y estuvo a punto de hacer el 3-0.

Sin Neymar, lesionado todavía del tobillo y sin Messi, recuperándose todavía de su positivo en coronavirus, Pochettino apenas introdujo novedades en la alineación. La ausencia más notada fue la de Ramos. El central sumó hoy su segunda suplencia consecutiva y, aunque tanto en Francia como dentro del club aseguran que está plenamente recuperado, las decisiones del técnico argentino hacen presagiar, al menos, una cosa bien distinta.

Tiene suerte el PSG de mantener a Mbappé. No sabemos, todavía, si seguirá en junio, pero el club debe aprovecharse del extraordinario momento de forma que vive el internacional francés. No hay jornada en la que no solucione los problemas de su equipo y es, con diferencia, el jugador más decisivo de los parisinos esta temporada.

Porque antes de que el talento de Bondy apareciera para hacer el 1-0, el Brest estaba haciendo un partido serio. Como cada fin de semana, cada vez que el conjunto parisino no acababa jugada, los bretones encontraban un latifundio a su espalda. De hecho, Donnarumma hizo la parada de la noche, y quizá de la temporada, salvando de forma heroica un mano a mano contra Cardona, que erró una ocasión que era más difícil fallar que marcar. Fue un aviso breve, pero que puso el miedo en el cuerpo al Parque de los Príncipes.

Sin embargo, después de la tormenta llega la tempestad, o, mejor dicho, Kylian Mbappé. El crack del PSG anotó su décimo gol en la Ligue 1 con un remate raso en la frontal que sorprendió a Bizot. Fue la primera mitad que lleva haciendo todo el curso el PSG. No brilla por juego, no genera demasiadas ocasiones, pero acaba decantando la balanza a su favor gracias a una genialidad del exjugador del Mónaco.

Con el cambio de Wijnaldum por Danilko, obligado por la lesión del neerlandés, el PSG pudo sentenciar nada más salir del túnel de vestuarios. Fue a través de Verratti, que es un centrocampista exquisito, quizá sin el reconocimiento que merece por sus continuas lesiones, que estrelló en el palo una jugada que fabricó el italiano en la banda izquierda. La oportunidad fue un aviso, ya que un minuto después, Thilo Kehrer marcaba por segunda jornada consecutiva. El lateral, de forma inesperada, aprovechó un buen centro de Nuno Mendes desde la izquierda para batir a Bizot y para, prácticamente, sentenciar el encuentro. Ramos entró veinte minutos con el partido controlado y el camero tuvo nada más ingresar en el terreno de juego una ocasión clarísima para haberse estrenado en la Ligue 1, pero un defensa rival lo evitó en la línea de gol. En definitiva, una buena victoria del PSG, que poco a poco se va entonando de cara a la eliminatoria de Champions.

Fofana agrava la crisis del Saint-Étienne

Un gol en el tiempo añadido de Seko Fofana culminó la remontada del Lens (1-2) y agravó la crisis del Saint-Étienne. El equipo es colista de la Ligue 1 y ha elevado a seis el número de derrotas seguidas. De momento, el cambio de técnico y la llegada de Pascal Dupraz no ha surtido efecto en los verdes.

El Saint-Étienne tuvo cerca el triunfo ante un rival que en la primera vuelta fue la revelación del fútbol galo. Tomó ventaja el conjunto local poco antes del descanso, en el minuto 38, con el gol del argelino Ryad Boudebouz tras recibir un pase de Adil Aouchiche. Mantuvo la ventaja el equipo de Dupraz a pesar del empuje de los visitantes, que equilibraron el choque a un cuarto de hora del final, cuando un córner botado por Jonathan Clauss fue aprovechado por Florian Sotoca. El duelo apuntaba al empate pero en la última acción del partido, un pase de David Da Costa fue recogido por Fofana, que envió el balón a la red para dar el triunfo al equipo de Franck Haise y agravar la crisis local.

Fue un nuevo paso atrás para los verdes, anclados en la última posición a cinco puntos de la salvación que marca el Girondins. El Lens, por su parte, vuelve a puestos europeos. Se sitúa cuarto con dos puntos de ventaja sobre el Stade Rennes y el Montpellier.

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