El City se siente campeón

Un gol de De Bruyne valió para vencer al Chelsea y ampliar la distancia al frente de la clasificación. 13 puntos separan a los mancunianos de los londinenses.

Xavi Heras

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Campeones, campeones. Oé, oé, oé.Así celebró el Etihad Stadium el tanto de Kevin De Bruyne en el minuto 70 de partido. Un gol con sabor a título de liga. Por lo menos para un Manchester City que llevó la iniciativa, dominó y ganó, que al remate es lo que cuenta. Pese a las quejas de Thomas Tuchel sobre la actuación de los suyos en el duelo de la primera vuelta en Stamford Bridge, el partido del sábado en el noroeste de Inglaterra siguió un guion similar. Los celestes mandaban y los de azul esperaban atrás. Replegados. Cómodos. Amenazando con las arrancadas de Romelu Lukaku, que dio la tarde a John Stones y Aymeric Laporte. Mucho ruido y pocas nueces.

Pese a que fueron Raheem Sterling, Phil Foden y Kevin De Bruyne quienes tiraron del carro en ataque, Jack Grealish fue quien tuvo la ocasión más clara del primer tiempo. Una pérdida de Mateo Kovacic en la frontal de su propia área permitió que el inglés encarase a Kepa Arrizabalaga, que ganó el mano a mano al ex del Aston Villa. En la segunda mitad la dinámica fue la misma, pero la intensidad mayor. Amagó con romperse el partido en la reanudación, con ambos equipos llegando con facilidad a la meta contraria. En este intercambio de golpes, Lukaku tuvo la oportunidad más clara para abrir el marcador y para acercar al Chelsea al liderato. Apareció Ederson, el hombre de la concentración constante. El brasileño sacó el disparo del belga.

Otro futbolista de Bélgica, Kevin De Bruyne, decidió que hasta aquí. Recibió un balón de Joao Cancelo y arrancó hacia la frontal del área. Dejó atrás a su par y sacó un disparo duro y ajustado, imposible para Kepa. El gol de acerca al Manchester City a su segundo título de liga consecutivo, así lo celebró el Etihad Stadium. Se vivió una erupción de ruido y euforia en la grada, en el banquillo y en el césped. El líder ganaba al segundo clasificado y ampliaba su ventaja hasta los 13 puntos. Nada pudo hacer el Chelsea al respecto. Thomas Tuchel dio entrada a Callum Hudson-Odoi, Jorginho y Mason Mount en los minutos finales. Cambió el sistema a un 4-3-3. Poco ímpetu, demasiado tarde. El Manchester City se siente campeón.