El árbitro del Túnez-Mali acabó en el hospital por una insolación
Según ha aclarado Essam Abdel-Fatah, al final del partido, el árbitro, de 42 años, tuvo que ser trasladado al hospital, lo que explicaría sus prisas por pitar el final primero y después su ausencia cuando el partido estaba a punto de reanudarse por unos minutos, ante lo que los tunecinos, indignados, se negaron a retomar el juego. Entonces iba a ser dirigido en su tramo final por el cuarto árbitro.
Sikazwe arbitra por sexta vez una Copa de África y también dirigió partidos en el Mundial de 2018 y en la Copa Árabe de 2021. Sin embargo, recuerdan varios medios, su nombre está más asociado con un escándalo de corrupción en 2018, que le costó la suspensión en 2018 por la CAF antes de ser absuelto en 2019.