Tensiones en el PSG de los galácticos: privilegios, un vestuario dividido y un detalle desconocido del “Icardi-gate”
Desde Francia aseguraron que la buena situación deportiva que atraviesa el club al término de este 2021 no es la misma que la que se vive puertas adentro
Sin embargo, aunque todo parece ser color de rosas en la capital francesa, lo cierto es que puertas adentro la situación no es la misma que la que se puede apreciar por el lente de la cámara o las redes sociales y así lo reveló el prestigioso portal galo L’Equipe.
Con la mirada puesta en la disputa entre los dos arqueros o en las situaciones de Kylian Mbappé, Neymar, Messi, Sergio Ramos, entre otros, el periódico francés hizo referencia a cómo todas estas estrellas provocaron “tensiones internas” por los “privilegios” que podrían tener.
La nota firmada por los periodistas Damien Degorre y Arnaud Hermant puntualiza en el “detrás de escena” del vestuario del combinado de París con el foco puesto en esas “tensiones internas” que no llegaron a la superficie por el momento, pero también en los “clanes” y “privilegios”.
El primer problema con el que se encontró Pochettino y que no pasó desapercibido para la prensa mundial fue la disputa por la titularidad entre los dos arqueros. La llegada de Gianluigi Donnarumma provocó un dolor de cabeza para el entrenador argentino, que se vio obligado a rotar entre él y Keylor Navas para darle una cantidad de minutos similares a ambas estrellas mundiales.
Más joven y confiado por conquistar la última Eurocopa con Italia, el entorno del arquero de 22 años comenzó a presionar tanto a la directiva como al cuerpo técnico en la voz de su representante, el controvertido empresario italiano Mino Raiola, quien sentenció en diálogo con la RAI: “No sé si esta situación se ha convertido en un problema, pero todos saben cómo va a terminar esta historia. Todo se decidirá a favor de Gianluigi”.
Si bien el medio francés advierte que podrían haber firmado una especie de “pacto de no agresión” entre los guardametas, relatan una anécdota singular que se dio en el vestuario tras el duelo contra el Niza cuando el ex PSG Marcin Bulka: “Habla con Navas y se da cuenta de que tiene el mismo proveedor de guantes que él, la marca inglesa Sells. Un testigo relata lo siguiente: “Navas miró a Donnarumma, que no estaba lejos, y respondió a Bulka: ‘Mira, estos son los mejores porteros del mundo que los usan’”. El italiano, claro está, utiliza otra marca.
Éste, sin embargo, se trataría de un problema menor dentro de un plantel colmado de estrellas y en el que según L’Equipe existen dos bandos claramente divididos. Por un lado los sudamericanos –y allegados– y por el otro, los franceses. Esta situación podría influir en la decisión de Kylian Mbappé a la hora de firmar o rechazar la oferta de renovación.
El delantero francés ya expresó su intención de salir del club en julio pasado y los dirigentes le negaron la posibilidad al rechazar las propuestas que llegaron desde el Real Madrid. Ahora, en cambio, el ex Mónaco es el que tiene la última palabra ya que, de no renovar, en enero podría comenzar a hablar directamente con Florentino Pérez.
Neymar, que pasó de ser el centro de atención del PSG a compartir ese protagonismo con el delantero francés y Lionel Messi, pareciera no terminar de acomodarse en su nuevo rol, pero ese sería un problema secundario después de que el periódico galo revelara que estuvo cerca de ser sancionado duramente por una actitud que tuvo.
El director deportivo, Leonardo, en cambio decidió no aplicarle un castigo por temor a que haya alguna filtración que dinamite aún más un vestuario que estaba intentando encontrar equilibrio. Al parecer, el brasileño no se había presentado a un acto con patrocinadores del equipo, un plantón que cayó mal en la cúpula directiva.
Finalmente, el tema de privilegios con las estrellas pudo ser otro detonante de tensiones dentro de un plantel que puertas afuera parece estar en su mejor momento. Entre los apuntados por el diario galo está Lionel Messi, quien reservó un restaurante para celebrar la obtención de su séptimo Balón de Oro y que al día siguiente no se presentó al entrenamiento junto a Leandro Paredes, tras sufrir “síntomas de gastroenteritis”.
Ésta actitud habría molestado a varios compañeros, al igual que lo que sucedió con Mauro Icardi, cuando pidió tres días libres para arreglar asuntos personales con su esposa Wanda Nara. El club accedió y, mientras el delantero y la empresaria publicaban los avances de la pareja en sus redes sociales, en el vestuario crecía el malestar, sobre todo después de su escapada a Milán. Sin embargo, los periodistas en cuestión revelaron un detalle desconocido de la pelea mediática: “Cuatro días antes, incluso antes de que estallara el problema en las redes sociales, Icardi estaba discutiendo con Wanda en su enorme 4x4, en el estacionamiento del Camp des Loges, justo después de dejar a su hijo en la escuela de fútbol, a los ojos de todos”.
La situación en el PSG parece estar a punto de detonar. Sin embargo las victorias y el buen andar del primer semestre lograron apaciguar todas las alarmas. Habrá que ver cómo continúa su camino en las principales competencias y que pasaría si dejara escapar alguna de ellas. Por ahora, es todo color de rosas en la Ciudad de las luces.