Mbappé vuelve a liderar la victoria del PSG
El conjunto parisino venció con comodidad a un débil Mónaco en una buena actuación colectiva. El de Bondy, con un doblete, volvió a ser el mejor jugador del partido.
Sin muchas novedades, pero con la tercera titularidad de Donnarumma en los cuatro últimos partidos (aunque no sea significativo, que el italiano haya jugado los dos partidos tras la cantada de Lens puede interpretarse como que le adelanta por la titularidad), el PSG buscaba resarcirse contra el Mónaco, equipo que, la temporada pasada, le ganó los dos encuentros y por poco le supera en la clasificación al conjunto parisino.
No sabemos si Pochettino ha hecho un pacto con el diablo esta temporada en París, pero la suerte que está teniendo el técnico en los momentos críticos no es una casualidad. Si el argentino se ha caracterizado por ganar la mayoría de sus partidos en el tiempo de descuento esta temporada, a ello hay que añadir los palos, que siempre caen a su favor. En los últimos tres partidos, el PSG ha recibido un poste (Niza, Lens y Mónaco), siendo hoy Diop el damnificado en el primer minuto. El mediapunta estrelló en la madera una gran jugada monegasca que puso el miedo en el cuerpo a la afición del PSG.
Sin embargo, y como viene siendo habitual, el PSG se ha caracterizado por ser un equipo que te mata si le perdonas. El Mónaco fue un gran exponente de ello. Diez minutos después del palo de Diop, Sidibé cometió un penalti absurdo sobre Di María, señalado por el colegiado tras ir al VAR, ya que en primera instancia no había señalado nada. Bajo un Parque de los Príncipes coreando su nombre al unísono, en una clara muestra de la desesperación por renovarle, Mbappé no perdonó desde los once metros.
Tras el 1-0, el PSG volvió a su versión deprimida, como si de un equipo sin alma se tratase. Poco a poco, el Mónaco empezó a encontrar los entresijos del repliegue parisino, sobre todo a través de Golovin y Diop, que aprovecharon que Verratti no es pivote defensivo para atacarle la espalda constantemente. Donnarumma salvó un mano a mano con Ben Yedder y Maripán erró una oportunidad flagrante en el área pequeña por un mal control del chileno.
Perdonarle al PSG ya lo había experimentado el Mónaco al principio de la primera mitad y lo volvió a sufrir el conjunto monegasco justo antes del descanso. Un error de Fofana en salida de balón se transformó en un gran contragolpe para el PSG que terminó con una gran definición de Mbappé a un buen pase de Messi. Tras dos meses, ambos empiezan a encontrarse y esa es la mejor noticia del fin de año que puede tener Pochettino. Un 2-0 engañoso, pero, en definitiva, un resultado casi insalvable para el Mónaco tras el descanso.
Como era de esperar, el PSG no cambió de marchas en la segunda parte y el Mónaco tampoco hizo el amago de querer remontar el partido desde el inicio ante el potencial ofensivo del conjunto parisino. Es más, dio la sensación que el 2-0 había desconectado totalmente al
Mónaco del encuentro, pues los de Kovac, aunque hicieron varios cambios, desaparecieron del partido como si de magia se tratase. Messi estrelló en el palo su quinto poste de la Ligue 1 tras una gran combinación con Mbappé que habría sido la sentencia del encuentro, pero el argentino sigue gafado de cara a portería. El Mónaco, casi conforme con el 2-0, no apretó y el partido acabó sin más g oles.