Fórmula 1: el estallido de radio de Lewis Hamilton durante el giro final en Abu Dabi
El británico señaló en el diálogo con su ingeniero Peter Bonnington que las decisiones del director de carrera Michael Masi fueron manipuladas
Al comentario de Hamilton se le podría agregar la imagen de furia de Toto Wolff, jefe de Mercedes, quien se calzó los auriculares y arremetió contra Masi por cómo resultó el procedimiento de salida del Safety Car y el adelantamiento parcial de los autos que marchaban con vueltas menos. Las presiones sobre el director de carrera fueron una constante durante el año de parte del boss de las Flechas de Plata como también de su par de Red Bull Racing, Christian Horner.
El golpe de escena del campeonato se produjo en el giro 53, cuando Latifi perdió el control del Williams y golpeó contra las barreras de contención del circuito de Yas Marina. La salida del Auto de Seguridad fue la esperanza a la que se aferró Verstappen, que con cinco vueltas por delante para la bandera a cuadros no descubría el modo de arrebatarle la victoria a Hamilton.
Convocado para calzar neumáticos blandos, la estrategia de Red Bull Racing sufría un impensado revés, cuando Masi impidió en un principio que los rezagados recuperaran la vuelta y dejaran al neerlandés en un mano a mano con el británico. Pero la decisión del director de carrera fue revisada en la anteúltima vuelta de las 58 y aquellos que marchaban entre los dos contendientes por la corona fueron habilitados a superar al líder.
Con gomas duras y desgastadas, la posibilidad de Hamilton de resistir el ataque que ensayaría Verstappen era mínima y la acción así lo reflejó: se retiró el Auto de Seguridad y el neerlandés necesitó de cinco curvas –el trazado tiene 16– para adelantar a su rival, ganar y coronarse campeón. Ahí fue cuando el británico y su ingeniero sostuvieron el siguiente diálogo, comentario que no se escuchó en la transmisión mundial, pero sí en el canal on board de Hamilton en la F1TV:
–Bonnington: “Una vuelta más, cuando cruces la línea de meta. Cinco coches entre tú y el segundo puesto. [Lando] Norris es el auto detrás de ti. Tiene neumáticos medios, de siete vueltas”.
–Bonnington: “Ahora están dejando pasar a los doblados. Deja pasar a los autos de los doblados. El Auto de Seguridad entrará [a boxes] en esta vuelta”.
–Hamilton: “¡Esto está siendo manipulado!”.
–Bonnington: “Estoy sin palabras, Lewis. Simplemente sin palabras”.
Hamilton no respondió durante la vuelta de desaceleración, tras la victoria y el título de Verstappen. Apenas se escuchó la recomendación de su ingeniero de estacionar el auto en la grilla, aunque la directiva llegó tarde y el británico lo hizo en parque cerrado. Recién dejó la butaca después de dos minutos, en los que seguramente reordenó los pensamientos de un gran premio que lo tuvo como dominador absoluto en 57 giros, pero que lo dejó completamente vacío. La última vez que había demorado tanto tiempo en descender fue luego del error que cometió en Bakú, que permitió el éxito de Sergio Checo Pérez.
El silencio Hamilton lo rompió de modo breve con Jenson Button para la señal de TV, aunque más tarde se salteó la conferencia de prensa de la FIA y las entrevistas con los diversos medios. Tampoco Toto Wolff asistió a las charlas, posiblemente enfadado por la situación, por el rechazo a las dos apelaciones que presentó Mercedes y que tuvieron la clasificación en suspenso por un par de horas y hasta por la estrategia de apelar la sentencia de Abu Dabi, para la que tiene 96 horas.
Sin embargo, Verstappen señaló que tanto el jefe de las Flechas de Plata como el séptuple campeón lo saludaron por la consagración: “Toto me envió un mensaje de texto, diciendo que merecía ganar y eso es muy bueno. Lewis se me acercó y me felicitó. Tiene que haber sido muy dura esa última vuelta para él, pero demuestra el respeto que nos tenemos. Creo que si la definición hubiera sido al revés habría sido más duro para mí, porque él ya tiene siete títulos”, expresó sobre el polémico desenlace el neerlandés, el nuevo rey de la Fórmula 1.