Festival de Messi y Mbappé
Ambos, con sendos dobletes, lideraron la holgada victoria del PSG contra un Brujas que no intimidó prácticamente durante los 90 minutos en su visita a París.
Pochettino sabe que, si rota y el equipo no funciona, las críticas van a ser todavía más atroces que cuando gana. El técnico no tiene tiempo y no está para rotar. Aunque el partido de hoy contra el Brujas era un mero trámite, el entrenador del PSG alineó a todo el potencial ofensivo disponible para intentar, aunque sea de forma paulatina, potenciar el colectivo en un equipo que, hasta la fecha, si por algo se ha caracterizado ha sido por exhibir el vasto potencial individual del que dispone.
El PSG realizó, posiblemente, los mejores 15 minutos de la temporada. Tiene suerte Pochettino de haber mantenido a Mbappé, ya que el internacional francés ha alcanzado este año su plenitud futbolística. Ya no es un extremo izquierdo que solo genera con su letal cambio de ritmo con espacios, sino que es un delantero total que ha añadido cualidades, como por ejemplo sus grandes apoyos al primer toque o la libertad para jugar por todo el frente de ataque. En un abrir y cerrar de ojos, concretamente en el minuto 7, el PSG ya ganaba 2-0 al Brujas con un doblete del talento de Bondy, que superó a Messi como el jugador más joven en alcanzar los 30 goles en Champions.
El que faltaba en unirse a la fiesta era Messi. El astro argentino no paró de intentarlo durante toda la primera mitad y encontró su premio finalmente al tercer intento. Y lo hizo mediante un remate con el interior en la frontal del área que por mucho que se repita no tiene antídoto de los rivales. Fue un golazo antes del descanso con el que vibró el Parque de los Príncipes, que coreó al unísono su nombre durante varios instantes. Fue una primera mitad extraordinaria ante un rival que no hizo acto de presencia en el campo.
En la segunda mitad, el Brujas sacó algo más de orgullo y aprovechó el apaciguamiento del PSG para reducir distancias por medio de Rits. El PSG volvió a su versión habitual en el segundo tiempo, siendo más el equipo apático que ha caracterizado a los de Pochettino durante toda la temporada que a la gran versión que se vio en el primer tiempo. Aún así, a Messi le bastó una baldosa para generar una jugada de peligro con Verratti, provocar un penalti y materializar desde la pena máxima su segundo doblete en Champions tras el del Leipzig. 34 años de edad, 18 temporadas, 154 partidos y 125 goles en Champions. Se encuentra sólo a 15 goles de los 140 de Cristiano en Champions. Una victoria balsámica para el PSG en un momento crítico de la temporada.
