Gimnasia goleó a Talleres y el Millonario podría consagrarse el jueves ante Racing en el Torneo 2021
El equipo cordobés cayó por 5-2 en su visita a La Plata y el conjunto dirigido por Marcelo Gallardo necesita solamente un punto para festejar el título; el Lobo se ilusiona con la Sudamericana
El gol de Carbonero para Gimnasia (1-0)
La alegría del Millonario y el inminente título de Marcelo Gallardo para completar su álbum es una historia. ¡Y este Gimnasia escribe la suya! El equipo de Néstor Gorosito nada tiene que ver con el del comienzo del torneo. El actual, el de Pipo, tiene la confianza a tope. Se siente ganador. Puede ganar (lo hace muy seguido) o no, pero cree en sus armas. Así salió a jugar en el Bosque: convencido de que podía superar a Talleres, uno de los mejores del torneo.
El gol de Ramírez para Gimnasia (2-0)
¿Cuánto tardó el Tripero en doblegar a la T? ¡Seis minutos! El Pulga Rodríguez mandó un tiro libre en forma de centro desde la derecha y Carbonero apareció como un rayo. El colombiano –habilitado por milímetros– entró solo, la paró y definió para el 1-0. Imposible hablar de justicia cuando el juego recién empezaba, aunque sí se puede subrayar la actitud del Lobo de buscar aquello que consiguió enseguida.
El descuento de Talleres, en contra (2-1)
Talleres, golpeado pero no herido, respondió por duplicado. Primero lo tuvo Diego Valoyes y el arquero Rodrigo Rey le ahogó el grito, mientras que unos minutos después el delantero Michael Santos quedó mano a mano y definió apenas por arriba del travesaño.
El gol del Pulga Rodríguez para Gimnasia (3-1)
Luego de esas dos jugadas para la visita, el conjunto local se acomodó y el trámite ingresó en un pozo. El conjunto dirigido por Gorosito, conforme con la ventaja; el de Medina, impreciso. Los arcos se alejaron de la pelota y las llegadas se esfumaron.
El gol de Komar para Talleres (2-3)
Hasta que apareció el Pulga. Él cambió la ecuación. El partido chato, de repente, se transformó en vibrante. Primero ejecutó otro libre, esta vez directo hacia el arco, y el balón salió medio metro afuera. Y antes del cierre del primer tiempo, Rodríguez tocó con Ramírez y lo dejó cara a cara con Guido Herrera. Si bien el arquero tapó el remate, la bola le quedó al atacante y en la segunda oportunidad no perdonó. Era el 2-0. Y faltaban un montón de emociones.
El gol de Licht, de penal (4-2)
La primera media hora del complemento fue extraordinaria. Los ataques se tornaron incontenibles para las defensas y eso hizo que el encuentro se convirtiera en un espectáculo repleto de ocasiones de gol. De goles, en realidad. Talleres descontó gracias a sus laterales: centro de Nahuel Tenaglia para Enzo Díaz, que conectó y después la metió Gerometta en contra para el 2-1. El Lobo, lejos de achicarse, estiró la ventaja a los dos minutos: muy buena jugada colectiva y definición implacable del Pulga. El 3-1 pareció un mazazo. Solo pareció. La T se acercó por el cabezazo de Komar luego de un córner desde la izquierda (3-2) y al rato el Lobo agrandó nuevamente la diferencia: penal al ingresado Rodrigo Holgado y suave definición de Licht para el 4-2. Todo esto en 30 minutos.
Alemán, de penal, para Gimnasia (5-2)
Y sobre el final cayó el quinto. El 5-2, otra vez de penal, lo hizo Alemán con un tiro alto. Tan alto como la fe que se tiene este Gimnasia.
Enorme victoria tripera. Enorme noticia para el Lobo, que sueña con clasificar a una copa, y también enorme noticia para River, que ahora sí acaricia el título.