Cómo saber si un perro tiene frío y cuáles son los síntomas más comunes

La temperatura corporal de las mascotas es una de las preocupaciones de todos los dueños. Estos son los factores que puede indicar si un perro puede tener frío.

As.com
La llegada del invierno y el cambio de las condiciones climatológicas con el frío provoca que utilicemos más prendas para abrigarnos.

En el caso de los perros, éstos son capaces de regular su propia temperatura corporal, debido entre otras cuestiones, a su pelo y a la capa de grasa que los mantiene calientes en esta época del año. Algunas razas de perro soportan mejor el frío que otras precisamente por estos elementos mencionados anteriormente y por ende, sufren más con el calor

Razas como el Husky Siberiano, el Mastín Tibetano o el Shiba Inu entre otros muchos, son algunos de los perros que mejor toleran el frío, según menciona el portal 'Mis Animales'. 

Temblores y nariz reseca, síntomas principales

A diferencia de los perros que sufren más en verano debido a su capa de grasa más gruesa, las razas de perro que se caracterizan por una capa de piel más fina son los que sufren en invierno. Con respecto a los síntomas que evidencian problemas de los perros con su temperatura corporal, destacan dos por encima del resto.

Uno de ellos son los temblores que experimentan cuando salen a la calle en el momento del día en que la temperatura es más baja. 

Sin embargo, no es el único factor que puede indicar un problema de frío. También están otros como la nariz reseca y fría, un aspecto evidente de que no tolera las bajas temperaturas. Los movimientos más lentos, una postura más recogida a la hora de dormir, o el simple hecho de que el perro duerma más de lo normal, también son señales que indican problemas con el frío.

Cuidar las almohadillas antes de su paseo

Por otro lado el Ministerio de Derechos Sociales, publicó en su perfil de Instagram una publicación sobre cómo pueden aguantar los perros, así como algunos consejos prácticos para evitar que éstos sufran con las temperaturas invernales.

Cuidar sus almohadillas antes de salir a pasear, o una mayor alimentación, son fundamentales en este momento del año. Las temperaturas bajo cero suponen un escenario a evitar para los perros, especialmente para los cachorros.


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