Memphis pierde gas
El ex jugador del Olympique de Lyon ha naufragado especialmente en los partidos grandes. Contra Bayern, Benfica y Atlético fue prácticamente inofensivo. En su descargo, puede decirse que está teniendo poca ayuda. Sin Ansu ni Dembélé todavía en el equipo, con Braitwaite lesionado y Griezmann ya en el Atlético (en los tres primeros partidos lo tuvo como compañero), se ha convertido en el principal foco para las defensas rivales. Demasiada atención para un solo jugador.
Hay un detalle que tampoco es baladí. Memphis lo ha jugado todo desde que empezó la temporada. En menos de tres meses de competición, ha jugado ocho partidos completos con el Barça y tres con la selección holandesa. Ya pasa los mil minutos (1.080), y ha vuelto a marcharse con Países Bajos. Es difícil saber si Memphis va a poder dar su mejor rendimiento si no tiene descansos sobre la temporada. Sucede que, ahora mismo, Koeman está obligado a darle todos los partidos porque no tiene más delanteros. Por su buena relación con el juego, la confianza en el Barça es que su rendimiento crezca cuando tenga socios que hablen su lenguaje como Ansu y Dembélé. Pero está por ver cuánto tardará en verse ese tridente y, sobre todo, cuánto tardarán en adaptarse uno al otro.