Manotazo del VAR al Getafe
Zubeldia comete un claro penalti en el 90’ por mano pero no lo señalan. Míchel salva el puesto y la Real desperdicia la opción de ponerse líder.
Los dos equipos tenían razones para dejarse la piel, pero el único que se la jugaba era Míchel, para quien el partido podía ser un capítulo más o el capitulo final de su última aventura en los banquillos. La derrota del Real Madrid en Cornellá ponía en bandeja el liderato a la Real Sociedad, caramelo que nunca amarga y que suele poner contentos a los patrocinadores.
Míchel afrontó la misión cual James Bond: ‘Sin tiempo para morir’. Ideó el Getafe más ofensivo de cuantos se han visto esta temporada. Arriesgó poniendo de titular a Arambarri, pieza clave que mudó de la enfermería al césped sin pasar por los entrenamientos. Imanol, en cambio, optó por la prudencia. Dejó a Isak en el banquillo y puso como referencia de ataque a Lobete, delantero del filial que ya había debutado en Primera y que incluso le hizo un gol al Barça.
La urgencia por ganar hizo que Mata pidiese penalti de Le Normand cuando era el atacante azulón quien tenía agarrado al defensa. La necesidad confunde.
El primer tiro a puerta, no obstante, tuvo color txuri-urdiñ y no llegó hasta el minuto 22, cuando Portu penetró en el área desde la banda derecha. El murciano le quiso buscar las cosquillas a Soria por abajo, pero su remate fue muy tierno. Primero fue el aviso y después llegó el susto, cuando Lobete tuvo una clara ocasión ante Soria pero cruzó en exceso. Era el minuto 35. La Real ejecutaba de manera notable el plan: robar y transición rápida. Así pilló al Getafe las dos veces.
Con la misma moneda le pagó el Getafe. Arambarri le quitó la pelota a Elustondo en el círculo central (con golpe incluido), Aleñá recogió el balón y de primeras se lo puso en carrera a Sandro. Una transición rápida que ambos aprendieron en La Masía. El canario, ante la duda, tiró de tremenda y fusiló a Remiro. La Real reclamó falta, el Getafe gritó gol.
Elustondo estuvo a punto de curar su fallo con un imponente remate de cabeza nada más comenzar la segunda parte. Despejó como pudo Soria. Además, estaba en fuera de juego. La Real subió el diapasón. Subió líneas y metió más velocidad. Oyarzabal, además, decidió aparecer. El 10 comenzó a encarar, a meterse por dentro y a combinar, como en el pase que le filtró a Merino en el 56’, gran jugada que acabó en gran parada de Soria.
Sandro quiso sorprender de falta (62’) y a punto estuvo de hacer su segundo gol y el 2-0. Pero el que sorprendió fue el que venía avisando: Oyarzabal. El eibarrés, de cabeza, anotó su sexto gol de la temporada aprovechando que Maksimovic perdió su marca y que Soria se quedó a media salida.
El Getafe se dolía por su costado izquierdo, por donde Gorosabel y Portu le sangraban. Por eso Míchel sacó a Jonathan Silva y el Getafe comenzó a jugar con doble lateral zurdo. El partido se congeló, pero tuvo un último minuto de aúpa. Primero, con el claro penalti cometido por Zubeldia al detener con la mano un remate de Olivera y, acto seguido, por el paradón de Soria a tiro de Isak.