La condición de Conte para relevar a Solskjaer en el United

Manchester, AS 

Que el futuro de Ole Gunnar Solskjaer en el banquillo del Manchester United iba a salir este lunes a la palestra era innegociable tras la debacle vivida en Old Trafford el domingo. Un 0-5, que pudo ser peor (0-4 al descanso), endosado por el Liverpool de Klopp que instala las alarmas en un proyecto que debía, tras un verano sensacional, pelear de tú a tú con los gallitos de la Premier. Sin embargo, este mayúsculo tropieza no es puntual, sino la continuación de marcha irregular, y hace que el noruego esté aún más discutido.

Duncan Castles, periodista de 'The Times', ha analizado, en su podcast 'The Transfer Window', los potenciales candidatos para reemplazar a Ole si cristalizase la destitución. Castles lo tiene claro: "Hay dos candidatos (para el banquillo del United) que han llegado a la cima, que están sin contrato y que estaría disponibles para el Manchester United sin compensación económica: uno es Zinedine Zidane y otro es Antonio Conte". El francés y el italiano son una constante cada vez que algún técnico de un equipo apetecible se tambalea. 

No obstante, el periodista señala que el que tendría más papeletas, según su información, es el ex de Juve e Inter. "La postura de Conte, me dicen, es que está interesado en el puesto, pero no sin condiciones. Antonio Conte, cuando elija su próximo equipo, quiere ir a un club que pueda ganar la Champions League. Quiere demostrar, lleva tiempo queriendo, que es uno de los mejores entrenadores del mundo. Para ello, sabe que debe ganar la Champions", explica.

Asignatura pendiente

Conte ya sonó para otros proyectos como el del PSG cuando no estaba clara la continuidad de Pochettino, el del Tottenham e incluso el del Real Madrid antes de entrar Ancelotti en escena. De momento, espera su oportunidad y parece tener claro que su prioridad será ganar una Champions que se le resiste. A nivel doméstico, su éxito es incuestionable, con las Serie A ganadas con Juve e Inter y la Premier con el Chelsea, pero Europa es su cuenta pendiente.