La UEFA dispara contra la FIFA por el Mundial bienal
El organismo que preside Ceferin habla de "peligros reales" en el cambio de calendario y enumera una serie de factores que devaluarían la cita mundialista.
La nota dice lo siguiente
En mayo de 2021, el Congreso de la FIFA encargó a la administración de la FIFA que realizara un estudio sobre la viabilidad de una Copa Mundial masculina y femenina cada dos años.
La UEFA asume que la palabra "viabilidad" abarca todos los efectos y consecuencias e incluye todas las cuestiones relacionadas con:
• el calendario, formatos y accesos para las fases finales y preliminares de las competiciones;
• el impacto en las competiciones de clubes y selecciones nacionales existentes, sus oportunidades deportivas y comerciales;
• el impacto en la salud física y mental de los jugadores;
• el impacto en los aficionados, su deseo de ver con más frecuencia torneos de este nivel, la sostenibilidad para ellos de viajes más frecuentes;
• evaluar el balance de oportunidades que tendrían las selecciones nacionales de las 211 federaciones miembro de la FIFA para desarrollarse en un escenario tan radicalmente cambiado;
• el impacto de una mayor frecuencia de torneos finales del Mundial en el valor y el atractivo del evento y su marca;
• el impacto en otras partes vitales del fútbol, como las competiciones femeninas que se encuentran en una fase de rápida expansión que requiere una mayor visibilidad y espacios de exclusividad;
• el impacto en los torneos juveniles, que tienen mínimas implicaciones comerciales pero que son esenciales para el desarrollo de los jóvenes talentos;
• el impacto en el sistema deportivo mundial y el respeto que el fútbol, como deporte más seguido en todo el mundo, debe mostrar a los espacios consolidados de exposición y explotación utilizados por otros deportes.
Mientras se espera conocer los resultados detallados del estudio encargado por el Congreso de la FIFA que abarcará todas las áreas mencionadas, la UEFA reconoce que la FIFA ha presentado una propuesta que implica la duplicación de los torneos finales del Mundial a partir de 2028, así como de las fases finales de los torneos de las Confederaciones a partir de 2025, combinada con una reestructuración masiva de las fechas reservadas por el Calendario Internacional de Partidos para los encuentros que disputan regularmente las 211 federaciones miembro de la FIFA.
Agradecemos la atención reservada al Campeonato de Europa de la UEFA, con la propuesta de doble frecuencia de su evento final, pero preferimos abordar un asunto tan sensible con un enfoque global y no especulativo.
La UEFA está decepcionada con la metodología adoptada, que hasta ahora ha llevado a que se comuniquen y promuevan abiertamente los proyectos de reforma radical antes de haber tenido, junto con otras partes interesadas, la oportunidad de participar en cualquier reunión de consulta.
Este plan conlleva peligros reales:
• la disminución del valor del primer acontecimiento futbolístico mundial, cuya celebración cada cuatro años le confiere una mística con la que han crecido generaciones de aficionados;
• la erosión de las oportunidades deportivas de las selecciones nacionales más débiles al sustituir los partidos normales por fases finales;
• el riesgo para la sostenibilidad de los jugadores, obligados a participar en competiciones veraniegas de alta intensidad cada año en lugar de realizar pausas de recuperación más largas en años alternos;
• el riesgo para el futuro de los torneos femeninos, privados de espacios exclusivos y eclipsados por la proximidad de los principales eventos masculinos.
Estas son sólo algunas de las serias preocupaciones que la propuesta de la FIFA provoca a primera vista y no pueden ser disipadas simplemente con eslóganes promocionales sin fundamento sobre los supuestos beneficios de un calendario más grueso para las fases finales.
La UEFA opina que el futuro del calendario internacional debe ser objeto de una auténtica consulta e intercambio entre la FIFA, las confederaciones y las principales partes interesadas en las competiciones, comenzando con una discusión abierta sobre los problemas percibidos y considerando una serie de soluciones que se identificarán en el curso del debate, teniendo en cuenta el interés del juego y el punto de vista legítimo de las diferentes partes.
En esta fase, el respeto a un proceso de consulta con las partes interesadas (que debería ser imparcial) sugeriría abstenerse de campañas de promoción de conceptos predeterminados unilateralmente que nadie ha tenido la posibilidad de ver en detalle y que tienen efectos de gran alcance, a menudo inesperados.
El 14 de septiembre, la UEFA y sus 55 federaciones miembro solicitaron a la FIFA que organizara una reunión especial con ellas para poder expresar sus preocupaciones sobre el impacto de dichos planes. Hasta la fecha, la UEFA y sus 55 federaciones miembro no han recibido respuesta de la FIFA a esta solicitud.