Cuatro objetivos galácticos
Tras el frenético final de mercado, la megaoferta por Mbappé y el fichaje de Camavinga, el Madrid resetea y fija nuevos grandes objetivos.
El caso de Mbappé (22) es claro. Las cartas están sobre la mesa y marcadas. Al Madrid, que ya ha llegado a un acuerdo con el jugador, sólo le queda esperar a que llegue el 1 de enero para firmarle con idea de incorporarlo la próxima temporada. Todo depende de que la estrella se mantenga firme y que no acepte las ofertas de renovación que le están llegando desde Doha, la última, de 45 millones netos por temporada, le colocaba como el futbolista mejor pagado del planeta.
El caso de Haaland (21) está más complicado. Como viene informando AS, se planteará una dura batalla entre el Real Madrid y el PSG para su fichaje si se completa el movimiento de Mbappé al conjunto blanco. Es el siguiente gran nombre que hay apuntado en la agenda de Florentino, que ya avanzó alguna conversación con el Borussia sobre su situación. Los alemanes se negaron a que saliera en el pasado mercado, pero hay un pacto con Raiola para facilitar su salida el próximo verano. El Madrid cuenta con la ventaja de la voluntad de jugador, que quiere vestir de blanco, y de la buena relación que tiene el propio Florentino con el CEO borusser, Hans-Joquim Watzke. El principal arma del PSG es el dinero. De cualquier manera, Raiola tendrá mucha influencia sobre la decisión que tome Haaland.
La situación del noruego es vinculante con la del otro gran delantero que juega en la Bundesliga, Lewandowsky (32). El polaco hizo un ademán de forzar su salida el pasado verano. Como informó AS, el Madrid lo tuvo a tiro. Le fue ofrecido, porque quería abandonar la Bundesliga para afrontar nuevos retos. En el mercado de 2022 sólo le quedará un año de contrato en el Bayern y querrá salir con toda seguridad. Una buena opción para el Madrid para este delantero de físico privilegiado que podrá salir a un precio razonable por entrar en el último año con el Bayern. Todo, si Haaland se va al PSG.