Yulimar Rojas eclipsa con su oro y su récord al campeón sorpresa de 100 metros
Todo estaba preparado para que Tokio-2020 coronara este domingo en la prueba reina de la velocidad al sucesor del mítico Usain Bolt, el hombre que había dominado los 100 metros en las tres anteriores ediciones olímpicas.
Pero instantes antes de esa final, el atletismo vivía un momento histórico, con el sexto y último salto de la venezolana Yulimar Rojas, que tenía ya asegurado el oro con el 15,41 metros que había logrado en el inicio del concurso.
Lograr esa marca tan buena desde el principio, a dos centímetros de la mejor marca personal con la que llegó a Japón, le garantizaba la medalla de oro porque ninguna competidora parecía capaz ni de acercarse.
Yulimar compitió entonces contra Yulimar. Únicamente buscando la ansiada plusmarca mundial, que llevaba persiguiendo en los últimos años.
En ese último intento, a todo o nada, Yulimar voló. Sabía que había llegado lejos, vio la bandera blanca de que el salto era válido y se confirmó la hazaña: 15,67 metros, nuevo récord mundial.
"No tengo palabras, no puedo describir lo que siento en estos momentos. Una medalla de oro olímpica, con un récord olímpico, con un récord del mundo... Es una noche fantástica", comentó la gran protagonista del día.
"Sabía que tenía esa distancia en mis piernas, que podía conseguirlo hoy. Estaba fallando algo en el aspecto técnico, pero en el último salto lo di todo para conseguirlo", explicó.
La plata en Tokio-2020 fue para la portuguesa Patricia Mamona (15,01 metros) y el bronce para la española Ana Peleteiro (14,87 metros), ambas con sendos récords de sus países.
Yulimar Rojas, plata hace cinco años en Rio-2016 por detrás de Caterine Ibargüen (37 años), sucede a la estrella colombiana, que fue décima este domingo con apenas 14,25 metros, en el palmarés olímpico en esta prueba.
La atleta de 25 años, campeona mundial en 2017 y 2019, completaba así su impresionante colección de logros y victorias con los dos grandes objetivos que le faltaban en su palmarés, el oro olímpico y el récord del mundo.
Mientras Yulimar Rojas y su amiga y compañera de entrenamiento Ana Peleteiro festejaban su gran noche en Tokio junto a su técnico, el mítico exsaltador de longitud cubano Iván Pedroso, el estadio Olímpico de Tokio se preparaba para vivir una imprevisible final de 100 metros.
Fiesta italiana
La prueba en la que Bolt acostumbraba a acaparar los 'flashes' con sus shows previos a la carrera y su impresionante desempeño en la misma tenía ocho aspirantes al trono vacío y sin un favorito claro.
El hombre más rápido de este año, el estadounidense Trayvon Bromell (9.77 en junio), quedó eliminado este domingo en las semifinales, por sorpresa, pero todavía más impactante fue el desarrollo de la final, con la victoria del italiano nacido en Estados Unidos Lamont Marcell Jacobs, con un crono de 9 segundos y 80 centésimas (nuevo récord de Europa).
Jacobs se convirtió en el primer atleta europeo que se proclama campeón olímpico en la línea recta desde el británico Linford Christie en Barcelona-1992. Superó al estadounidense Fred Kerley (9.84), plata, y al canadiense Andre De Grasse (9.89), bronce.
Se trata de una auténtica hazaña para Jacobs, un velocista de 26 años nacido en El Paso (Texas, Estados Unidos) de madre italiana y padre estadounidense.
No fue la única alegría italiana en el atletismo este domingo, ya que Gianmarco Tamberi y el catarí Mutaz Essa Barshim compartieron el oro en el salto de altura, tras finalizar igualados y rechazar disputar un desempate.
El bronce fue para el bielorruso Maksim Nedasekau. Los tres competidores saltaron 2,37 metros, pero Tamberi y Barshim finalizaron en igualdad perfecta.
La otra final del atletismo este domingo se había disputado en el turno matinal y allí se coronó la campeona mundial china Gong Lijiao (20,58 metros), por delante de la estadounidense Raven Saunders (19,79 m, plata) y de la neozelandesa Valerie Adams (19,62 m, bronce).