Un estreno sin puntería
Elche y Athletic firman tablas tras una primera parte vibrante. Agirrezabala deja dos paradones en su debut.
Pudo ganar cualquiera, aunque las ocasiones más claras las tuvo el Elche, especialmente en la primera parte. Del tiroteó inicial se pasó a una segunda parte mucho más conversadora, en la que las piernas, el cansancio y las lesiones (De Marcos, Roco y Guti) frenaron un poco el ambiente de fiesta del Martínez Valero, durante minutos convertido en una pequeño San Mamés por la masiva presencia de aficionados rojiblancos.
Al Elche y Athletic sólo les faltó el gol en su puesta en escena. Ambos se repartieron las ocasiones y las lamentaciones. El equipo de Marcelino pareció tener más chispa, sobre todo en la línea de tres cuartos. Pero el Elche mordía cuando se veía cerca del debutante Agirrezabala. Boyé arrancó con hambre y él sólo se bastó para poner en alerta a los leones. Bigas la tuvo en el primer minuto, pero Julen, en una de sus especialidades, le sacó el disparo a bocajarro. Berenguer rozó el gol tras una jugada ensayada y a Fidel le anularon otro por fuera de juego. El partido era una ruleta rusa. Roco evitó un gol cantando de Williams y Pere Milla falló la más clara cuando sólo tenía que amortiguar el balón.
El Elche compensaba sus carencias en la elaboración con velocidad y energía, mientras que el Athletic, espoleado por su buena pretemporada y el gen Marcelino, aguantaba de pie el intercambio de golpes. El segundo acto fue mucho más tranquilo y sólo tocó esperar al descuento para ver de nuevo en acción al nuevo gato de Lezama. Agirrezabala, en una acción de muchos reflejos, evitó el gol de Tete Morente. La fiesta sin puntería acabó ahí.