NEWEY: "2022 será una revolución"
Adrian Newey, director técnico de Red Bull, asegura que la Fórmula 1 se prepara para lo que él califica como "el mayor cambio en 40 años".
La postura que adopta es totalmente lógica, pues a estas alturas el equipo austriaco se postula como el máximo aspirante a derrocar el trono de Hamilton y Mercedes. Tras encadenar varios reveses consecutivos, tan sólo ocho puntos separan a Verstappen del campeón, y doce al 'toro energético' de los de Brackley en la clasificación de constructores. No obstante, el propio Newey reconoce que el equipo está haciendo un esfuerzo para trabajar de cara al presente y al futuro.
"Tenemos que seguir desarrollando el coche de este año pero no podemos concentrarnos solo en esto e ignorar lo que está por venir. Estamos haciendo todo lo posible para hacer malabares con ambas bolas y, al mismo tiempo, hacer frente al límite de costos que, lamentablemente, nos ha llevado a reducir el tamaño del equipo en ciertas áreas", explica el británico.
Su carrera de cuatro décadas le ha llevado a ser uno de los ingenieros más respetados del Gran Circo. Una trayectoria de 40 años donde Newey no ha visto un cambio de regulación semejante al que se avecina en 2022: "Yo diría que este es el cambio de regulación más grande que hemos tenido desde que se prohibió el efecto suelo de los Venturi a finales de 1982. La verdad es una revolución. Lo único que realmente permanece igual es la unidad de potencia. Todo lo demás es diferente", apunta.
Verstappen tiene madera de campeón
El que fuera uno de los artífices de la época dorada de Red Bull, cuando sumaron cuatro dobletes consecutivos de 2010 a 2013 con Vettel al volante, conoce muy bien las cualidades que debe recoger un campeón del mundo. Y según él, Verstappen las tiene: "Tiene el mismo valor de acero que cualquier campeón mundial. Puede dejar el pasado atrás y esperar la próxima carrera. Su capacidad de conducción es obviamente excelente y se ha convertido en un gran corredor. Realmente no ha cometido ningún error este año. Las carreras en las que no ha puntuado (Bakú, Silverstone y Hungría) no han sido culpa suya, y se ha recuperado de todas ellas. No creo que la presión de la situación le afecte", zanja.