La autora del descuartizamiento del profesor Nibaldo Villegas habló por primera vez y dio detalles del crimen
La mujer relató el asesinato de su ex pareja en 2018
La mujer identificada como Johanna Hernández está detenida desde 2018 al ser condenada a un mínimo de 40 años de presidio por el delito de parricidio en contra del docente. El crimen lo cometió junto a Francisco Silva, su cómplice y quien tiene que pasar 20 años tras las rejas.
Johanna y Nibaldo se conocieron cuando ella tenía 23 años y estaba terminando sus estudios. En diciembre de 2009 ambos decidieron consolidar su relación luego de que Johanna se alejara de su esposo con el que se unió cuando tenía 15 años. De esa manera, iniciaron la proyección de formar una familia.
“(Nibaldo) Era un buen marido, una persona de muy buen corazón, ayudaba a quien podía. Pucha una excelente persona. Por parte de la familia Villegas tampoco hubo diferencias, me aceptaron a mi con mis dos hijos de mi anterior matrimonio. Los hicieron parte de la familia”, sostuvo en entrevista con el programa Informe Especial.
La entrevista además reflejó que Johanna estudió técnico en enfermería gracias a que fue motivada por Nibaldo y que en los ocho años que estuvieron juntos “no tuvimos mayores problemas”.
“Los ocho años que estuvimos juntos no tuvimos mayores problemas, crisis. Si teníamos alguna discrepancia, el pescaba su buzo, sus zapatillas y salía a correr y volvía cuando ya estaba todo en calma. Las cosas se conversaban en la pieza y se arreglaban los problemas. Pero el último año empezamos a tener problemas más grandes”, dijo Hernández.
Sin embargo, a pesar de que la relación funcionaba bien y sin grandes sobresaltos, Nibaldo Villegas presentó una denuncia por violencia intrafamiliar, la cual fue desestimada. La pareja después de esto se quebró.
“Tuvo que haber sido esa vez que una vez peleamos y yo empecé a tirar todas las cosas al suelo y le dije que se acababa todo”, dijo Hernández. Tras la separación, se desencadenó una disputa por la casa familiar y también por la tuición de la única hija del matrimonio.
Un caso de terror
El crimen como tal tuvo su origen el 10 de agosto de 2018 cuando Hernández contactó a Villegas para celebrar su cumpleaños en el hogar de éste ubicado en la localidad de Peñablanca, en la Quinta Región de Chile.
En ese tiempo Johanna había iniciado una relación con Silva, y 10 días antes del parricidio, ambos iniciaron la planificación del asesinato. Aunque ellos dicen que nada se planificó, y se inculpan mutuamente, la indagación policial y judicial confirmó que ambos mienten y que todo fue milimétricamente organizado.
En esa jornada de cumpleaños Johanna llegó con sushis y una malta con huevo además de una dosis de clonazepam para dopar al profesor. “Nibaldo en 10 minutos ya no coordinaba. Se quedaba dormido con un sushi en la boca, yo se lo saqué para que no se fuera ahogar”, dijo Hernández.
Una vez drogado el profesor, Francisco ingresó a la casa, se cambió de ropa y se puso una vestimenta negra. Tras eso, el cómplice fue en dirección a la pieza donde estaba Nibaldo cargando un cuchillo para descuartizarlo.
“Yo nunca vi el cuerpo, yo dejé a Nibaldo durmiendo arriba y después cuando subí era un bulto que estaba en la cama. Yo jamás toqué el cuerpo de Nibaldo, quedé con sangre porque me pasó guantes de procedimiento para que yo limpiara la cama”, sostuvo Hernández.
Ya perpetrado el crimen, ambos cargaron el cuerpo para ingresarlo a un automóvil para luego ir a servicentro de la localidad de Quilpué, en la Quinta Región de Chile, para sacar dinero desde un cajero automático usando una cuenta bancaria de la víctima. Allí Francisco hizo un giro de 35 mil pesos (USD 45).
Deshacerse del cuerpo
Horas después de cometido el homicidio, Johanna aseguró haber despertado en la casa de la mamá de Francisco “y cuando sale, me despertó, me pasó bolsas de basura, me pasó unas cintas de color naranja, se subió al auto y partió camino a Las Docas”, un balneario.
Allí la investigación asegura que Francisco y Johanna prendieron una fogata para quemar algunos restos de Nibaldo y sus vestimentas. Dos días después la búsqueda de la víctima era total y la pareja regresó a este lugar para arrojar los restos al mar.
“Cuando nos fuimos dejó eso encendido. Subimos, paró donde mismo había bajado el cuerpo horas antes. Se baja, pesca una bolsa que sacó del maletero y la tiró lejos hacia la quebrada. No sé qué iba en esa bolsa. Pero bajó un poco y la tiró lejos”, agregó la mujer a Informe Especial.
El 15 de agosto de 2018 un grupo de turistas a bordo de un bote descubrieron restos de Nibaldo Villegas flotando en el mar. Johanna cuenta que “ahí me desmayé, quedé mal. Dije que era el cuerpo de él”. Horas después Francisco y Johanna fueron detenidos.
El fiscal José Miguel Subiabre cerró que “ambos son asesinos, Johanna Hernández por el vínculo de matrimonio, un reproche mayor, porque es una conducta que se llama parricidio. Respecto a Francisco Silva, actuando alevosamente, es un homicidio calificado; certeza jurídica, ambos son los autores y asesinos. Ambos ante el tribunal y a la Fiscalía mintieron”.