Viento, humareda, gritos y desesperación en un vuelo de Santa Cruz a Tarija
"Parecía como si voláramos sobre piedras, además de las turbulencias. Lo más grave fueron los giros bruscos y todo era negro, negro en las ventanas, parecía que el piloto no podía encontrar pista", comentó a radio Mistol, de la capital tarijeña, una de las pasajeras.
El vuelo partió a las 17:20 del aeropuerto de Viru Viru, en Santa Cruz, y logró aterrizar a las 19:00 en el aeropuerto internacional Oriel Leaplaza, de Tarija.
Los fuertes ventarrones y una densa humareda a causa de un incendio de magnitud en la zona ocasionaron que el piloto no pueda aterrizar la nave de BOA en su destino. La estación radial reportó escasa de visibilidad y fuertes ráfagas de viento que obligaron a la tripulación a sobrevolar varias veces la ciudad, antes de descender a tierra.
"Hubo un momento que giró de golpe y se apagaron las luces y era como que estaríamos cayendo, y de repente se soltaron las mascarillas y pocos minutos después, otro giro brusco. La gente empezó a gritar, una señora mayor perdió el control y empezaba a pedirse a la Virgencita, otros se agarraban duro de los asientos; como yo, muchos empezamos a rezar", señaló Daniela, otra de las viajeras.
Un vuelo directo de Viru Viru a Tarija demora cuando mucho una hora, pero por los percances que sorteó la nave de la aerolínea estatal, el avión estuvo una hora y 40 minutos en el aire.