Insólita decisión del VAR en los Juegos Olímpicos: echaron a un jugador de Brasil que ni siquiera cometió infracción
Fue en el partido ante Costa de Marfil que terminó 0 a 0 por la segunda fecha del Grupo D
Infobae
Brasil empató sin goles ante Costa de Marfil este domingo en Yokohama, en la segunda fecha de la zona D del fútbol masculino en Tokio 2020. El vigente campeón del certamen venía de golear a Alemania por 4 a 2 pero esta vez no pudo destacarse porque desde los 13 minutos se quedó con 10 hombres por la escandalosa expulsión de Douglas Luiz.
La jugada de discordia tuvo lugar después de una pérdida de balón del conjunto sudamericano en ataque que posibilitó el contragolpe a toda velocidad de los africanos. Una pelota profunda entre líneas le permitió a Youssouf Dao ganarle la posición a su marcador, Douglas Luiz, pero cuando parecía que se iba mano a mano, el delantero cayó producto de una supuesta infracción.
El árbitro estadounidense Ismail Elfath cobró la falta y amonestó a Douglas Luiz, quien le juraba que no había derribado a su rival. Mientras el juez ordenaba la barrera y Costa de Margil se preparaba para ejecutar el tiro libre cerca del área desde el VAR llamaron al norteamericano para que repasara la acción.
En la cabina, que no puede intervenir por una amonestación, detectaron que la acción era una jugada manifiesta de gol, por lo que el correcto castigo para el brasileño era la tarjeta roja. Por eso, Elfath se acercó a revisar la maniobra. Pero lo insólito es que el referee no fue capaz de observar que Douglas Luiz nunca le había cometido falta a Youssouf Dao, sino que el delantero se había dejado caer de manera alevosa.
Pese a la claridad de las imágenes, el árbitro finalmente expulsó al defensor brasileño que juega en el Aston Villa y dejó al conjunto sudamericano con 10 hombres cuando iban menos de 15 minutos de partido.
“Son circunstancias de juego, y tenemos que superar las circunstancias. Fue una jugada que tengo mis dudas de si fue para expulsión o no, pero es parte del juego”, declaró el capitán de la Canarinha, Daniel Alves, una vez terminado el encuentro. “No creo que la expulsión haya dificultado el partido, ya que logramos crear las mejores oportunidades de gol y construir con un hombre menos. Somos un equipo y debemos apreciar el gran trabajo que hicimos hoy”, concluyó el lateral derecho del San Pablo.
Mermado por inferioridad numérica, Brasil siguió dominando la posesión, sin renunciar al ataque, pero apenas tuvo chances claros de marcar. Mientras que estuvieron con un hombre más, Costa de Marfil incomodó al campeón de Rio 2016, acercándose con peligro al área de Santos, especialmente con Youssouf Dao en ataque, y discutiéndole a los brasileños el dominio del centro de la cancha con un gran trabajo de Franck Kessié.
A falta de 10 minutos para el final, el combinado africano sufrió la expulsión de Kouassi Eboue por doble amonestación y de vuelta a la igualdad numérica, Brasil buscó el gol del triunfo con más insistencia, pero Eliezer Tape selló su arco hasta el pitido final. Con este empate, el vigente campeón olímpico y Costa de Marfil suman cuatro puntos e intentarán definir el boleto para cuartos el miércoles.
En la última fecha, los dirigidos por André Jardine jugarán ante Arabia Saudita en Saitama, mientras que el combinado africano, a la misma hora, medirá fuerzas con Alemania en el Estadio de Miyagi.