Hay liquidez para un galáctico
Los datos anticipados de las cuentas del Madrid muestran que, en caso de ser necesario, el club tiene margen para una gran inversión.
Por un lado, adelanta el Madrid en este pequeño resumen de las cuentas que hay un saldo en Tesorería de 120 millones de euros. Ese es, por tanto, el dinero que hay en caja. Por otro lado, señala la entidad que el Madrid “tiene a 30 de junio 2021 pólizas de crédito sin disponer por importe de 361 millones €, lo que, unido a la tesorería, permite afrontar con holgura los compromisos de pago previstos”. Hay liquidez para los pagos previstos y un colchón importante para cubrir posibles eventualidades si la crisis se endurece… pero también, es obvio, para afrontar alguna operación de calibre, un fichaje galáctico, si hiciera falta.
En definitiva, el Madrid saca pecho por haber conseguido ahorrar un total de 295 millones para compensar la pérdida de ingresos de 300 millones. Y eso le deja en una buena posición si tiene que ir al mercado (a costa en este caso, eso sí, de endeudarse más). En este sentido, si bien parece claro que a pesar del deseo de Mbappé el plan del Madrid es esperar a enero para ficharle a coste cero, hay nombres importantes sobre la mesa sobre los cuáles el club blanco podría forzar la situación. El más importante es el de Haaland.
En las últimas fechas hay varios equipos que están haciendo fuerza para sacar a Haaland de Alemania este mismo verano. Principalmente el Chelsea, campeón de Europa a pesar de la falta de puntería de sus hombres de ataque. Se está hablando de una primera oferta de la entidad londinense de 175 millones. Como avanzó AS, el Borussia puso un precio prohibitivo de 200 millones hace unos meses pensando en la continuidad del delantero… No hay tanta diferencia con respecto a lo que ofrece el Chelsea y los 200 que piden, y Raiola está muy receptivo ante la posibilidad de que su jugador sea vendido ahora, pues entiende que quedarse otro año en la Bundesliga es un riesgo… Si ese movimiento sigue cogiendo forma, el Madrid tiene que tomar cartas en el asunto y, según las cuentas oficiales, hay liquidez para hacerlo.