Boca y un reclamo demasiado liviano ante Conmebol
El presidente Ameal y Jorge Bermúdez hablaron con la prensa, pero sus declaraciones tuvieron sabor a poco. ¿Quién dirigirá la revancha en Belo Horizonte?
"Ver que un equipo tira la pelota afuera después de que el árbitro sancione una jugada para no reanudar el juego es algo llamativo. La imagen que quedó de la Libertadores es lamentable. Parecía un partido de potrero", agregó Jorge Bermúdez, casi en simultáneo, en una entrevista con ESPN.
Ni el presidente, ni uno de los integrantes del Consejo de Fútbol jugaron fuerte en los micrófonos. La protesta mediática luego del increíble error del VAR, que le costó un gol a Boca frente a Atlético Mineiro, fue demasiado pasiva. Los hinchas se descargaron en las redes y mostraron su disconformidad.
Para colmo, Cerro Porteño, también perjudicado por quienes deberían aportarle transparencia al juego, emitió un duro comunicado y pidió la suspensión de todos los árbitros que estuvieron en el partido contra Fluminense, donde le anularon un gol de manera insólita ya que desde la cabina no vieron que un futbolista rival habilitaba a quienes estaban dentro del área.
Boca movió sus fichas y decidió no confrontar a la Conmebol, al menos de manera pública, y se enfocó directamente en lo que será el partido revancha en Belo Horizonte. Sin embargo, mientras la espuma baja y la bronca por lo ocurrido en la Bombonera disminuye, los dirigentes xeneizes estarán muy atentos a lo que pueda ocurrir dentro de algunos días en Brasil. Porque un error lo puede tener cualquiera, pero lo sucedido el martes es inadmisible para los tiempos que corren.
