Tras tirotearse con la policía, murió Lázaro Barbosa, uno de los asesinos más temibles de la historia de Brasil
El hombre de 32 años es responsable por lo menos de 8 asesinatos desde 2007. La policía llevaba 20 días en una búsqueda implacable que acaparó la atención de todo el país
Barbosa, que ya había tenido antecedentes de asesinatos previos y a quien las autoridades brasileñas describen como un “psicópata impredecible”, murió en el operativo que buscaba dar con su captura y en el que se desplegó una fuerza de 270 agentes, drones equipados con infrarrojos, perros de rastreo y helicópteros.
En medio del operativo hubo un intercambio de disparos que dejaron gravemente herido al asesino, quien falleció en el hospital a donde fue trasladado luego de ser arrestado.
:quality(85)/cloudfront-us-east-1.images.arcpublishing.com/infobae/LAAD63JRUBEDVNJT4DTQPRP6UE.jpeg%20420w)
Según la rueda de prensa que dio el secretario de Seguridad de Goiás (estado de Brasil), Rodney Miranda, Barbosa contaba con “una red de apoyo” que lo estaba ayudando a escapar. También se dijo que durante los 20 días en los que consiguió eludir a las autoridades, el asesino tomó rehenes para facilitar su escape.
La búsqueda implacable contra Barbosa se desencadenó el pasado 9 de junio, cuando el hombre entró en una granja ubicada en el Distrito Federal en el sector de Ceilândia y mató a cuchilladas y tiros a una pareja de esposos junto con sus dos hijos, de 15 y 21 años.
Para ese momento, el “asesino en serie del DF” como lo apodó la prensa, ya era sospechoso de matar a un hombre en otra finca en Goiás.
Durante los días en que duró la persecución, Barbosa invadió al menos 11 haciendas, tomó personas rehenes, robó casas y se enfrentó en varias ocasiones con la Policía, siempre logrando huir de las autoridades.
En uno de esos enfrentamientos, Barbosa tomó como rehenes a un matrimonio y su hija adolescente y los llevó hasta la orilla de un río donde presuntamente se disponía a asesinarlos. Pero gracias a la joven, que logró enviar un mensaje a la Policía, la familia se salvó. Sin embargo, el peligroso hombre logró escapar huyendo por los ríos, en una zona que conocía muy bien.
:quality(85)/cloudfront-us-east-1.images.arcpublishing.com/infobae/ILQEF5ICZEI5F43LQMNHTSSF4U.jpg%20420w)
Con tan solo 19 años, Barbosa empezó a acumular antecedentes criminales. En 2007 fue arrestado por cometer un doble homicidio en Bahía: sus víctimas fueron dos hombres que intentaron ayudar a una mujer que perseguía con intenciones de matarla.
En ese momento, Barbosa logró eludir nueve días a la policía, antes de entregarse a causa de una herida que lo tenía en peligro de muerte. Duró 10 días en prisión, pues se escapó tras su arresto.
En 2009 lo detuvieron por violación, robo y porte ilegal de armas. Duró cinco años preso, pero le concedieron el régimen semiabierto y dos años después se volvió a fugar.
En 2018 fue detenido por tercera vez por dos homicidios y una violación, pero se volvió a escapar.
Barbosa reapareció el pasado abril, cuando entró a una finca y golpeó a un anciano con un hacha. Días después, invadió una casa, encerró al dueño con su hijo en el dormitorio, esperó que llegara su esposa, la sometió y la violó en un matorral cercano.
La cacería de Barbosa se apoderó de Brasil y creó un clima de miedo en la zona, con algunos residentes declarando a medios locales que sentían temor de irse a dormir o salir de sus hogares ante un posible encuentro con el peligroso asesino.
Videos de la captura de Barbosa comenzaron a circular por redes sociales en los que se ve a los oficiales celebrando con los brazos al aire haberlo abatido.
El gobernador del estado de Goiás, Ronaldo Caiado, elogió a la policía por aprehender a Barbosa. “Felicitaciones a nuestras fuerzas de seguridad. ¡Le dan a nuestra gente motivos para estar orgullosos! Goiás no es un Disneylandia para bandidos”, dijo en su cuenta de Twitter.