Si Lukaku sonríe, Bélgica sonríe
El delantero del Inter anotó el el único tanto del partido para los de Roberto Martínez. Encuentro soso de Croacia que no tuvo casi ocasiones de gol.
A partir del 30' la balanza comenzó a denivelarse en favor de los de Roberto Martínez. Momento en el que llegó la primera ocasión (doble) de la primera mitad. Lukaku se fabricó el espacio para mandar el balón al larguero y en el rechace, con Livakovic ya vencido, Carrasco remató con la cabeza con el mismo destino. El susto para Croacia no quedó ahí y el partido comenzó a coger entonces un tono blanco, con los belgas lanzados en tromba al ataque. Tras varios acercamientos sin premio, llegó el gol de Lukaku. ¡Quién si no! El delantero de Inter recogió un rechace dentro del área pequeña y no se lo pensó dos veces para levantar el pie con un movimiento acrobático y alojar el balón dentro de la portería. Pesa 94 kilos pero pocos tan ágiles como él.
En la segunda parte las fuerzas se equilibraron. Mientras Tielemans se encargaba de filtrar pases en busca de Lukaku; Modric ponía orden en el juego croata. Al madridista se le vio incómodo sin muchas alternativas de asociación en la medular. Quizá por ello y con vistas a la Eurocopa tras una temporada cargada de partidos, Dalic decidió quitar tanto al madridista como a Kovacic, en el minuto 60. De la última media hora de lo poco destacable fue el regreso de Hazard a los campos de juego tras casi un mes de ausencia (tuvo once minutos) y otra clara ocasión de un insaciable Lukaku que tuvo el 2-0 con un remate en el área pequeña, pero que Livakovic salvó con una tremenda parada. Y para poner el colofón a una buena victoria, Courtois hizo su habitual intervención para salvar el resultado, a remate en semifallo de Brekalo. No hubo más. Si Roberto Martínez quiere que Hazard vuelva a disfrutar con su juego como dijo en la previa, el madridista lo tendrá fácil junto a Lukaku. Si él sonríe, toda Bélgica lo hará