Modric plantea un dilema
Ha sido su segunda temporada con más minutos disputados desde que llegó al Real Madrid. El curso que viene necesita recambio para poder dosificar.
Ahora, con el croata recién renovado hasta 2022, se presenta un dilema para el Real Madrid de Ancelotti, porque Modric jugará la Eurocopa con Croacia después de una temporada extenuante con su club en la que ha llegado con el piloto de la reserva encendido a los partidos más importantes. El año que viene, con 36 años, Ancelotti está obligado a dosificarle. No puede repetir otro curso como el actual.
El perfil del croata lo da Dani Ceballos. De hecho, en 2017 se le fichó con el cartel de heredero de Modric, por sus similitudes en el juego. El utrerano fue importante en el Madrid en la única temporada en la que no estuvo Zidane (2018-19), pero con el técnico francés nunca ha tenido regularidad. Después de dos buenos años en el Arsenal su prioridad es triunfar en el Madrid.Habrá que ver si Ancelotti le da confianza.
También está la opción de Odegaard. Eso intentó Zizou el pasado verano, cuando pidió su regreso. Sin embargo, el noruego está mucho más cómodo más adelantado, en la mediapunta, sin tanta responsabilidad en la salida del balón. Probablemente con los años retrase poco a poco su posición, igual que le pasó a Modric en su día, pero ahora mismo es un perfil diferente.
Antonio Blanco, del Castilla, llegará más para ser el recambio de Casemiro que el de Modric, aunque también sirva para dar oxígeno al croata cambiando el sistema.