Los Harlem Globetrotters piden entrar en la NBA
El mítico equipo del barrio de Nueva York dice que "es hora de que la NBA reconozca su contribución al baloncesto" de cara a una futura ampliación de la liga.
Los rumores, y algo más que rumores (el propio Adam Silver se ha mostrado favorable a la idea) de una expansión de la NBA viene ya de hace unos años. La idea parece girar en torno a incluir dos nuevas franquicias, dejando el número total de participantes en 32. Las favoritas según todos los conocen el tema de primera mano son Seattle y Las Vegas. La primera por su tradición baloncestística y dentro de la propia NBA. La segunda, por su poder económico y porque en los últimos años ha sido destino de equipos de hockey sobre hielo y de fútbol americano. Parece difícil que los Globetrotters tengan opciones sobre estas ciudades, dando por hecho que su franquicia se asentaría en el barrio de Harlem, Nueva York, ciudad donde ya hay dos equipos: los Knicks y los Nets. Aunque nada obliga, claro, a que el dueño o dueños de la hipotética franquicia de los Globetrotters se llevasen el equipo a otra ciudad, incluidas Seattle y Las Vegas.
Aunque desde hace décadas los Globetrotters han quedado como un equipo de exhibición reconocido por sus jugadas espectaculares, casi circenses, en sus inicios jugaba partidos serios de competición. Tras su fundación en 1926 los tres primeros años perdieron sólo 32 partidos de 398 disputados. La dificultad para encontrar rivales de nivel les hizo empezar a explorar la versión por la que son más conocidos actualmente, en la que mezclaban el baloncesto con la comedia. Sin embargo, nunca dejaron de jugar partidos de verdad durante los años previos a la creación de las primeras ligas profesionales estadounidenses y en los inicios de estas, cuando era imposible encontrar jugadores negros participando en ellas. Por ello, los Globetrotters se convirtieron en un símbolo contra el racismo para la comunidad negra y grandes jugadores que más tarde sí pudieron entrar en la NBA formaron parte de sus plantillas. El más famoso de todos, sin duda fue Wilt Chamberlain.