Facu Torres y la importancia del revulsivo
El joven atacante de Peñarol entró al campo en el 60' ante Chile y consiguió revolucionar en cierta medida el apartado ofensivo de Uruguay.
Ante Chile, Uruguay acumuló un total de 17 remates (incluyendo bloqueados), alcanzando la portería en cinco de ellos. Con Cavani y Luis Suárez compartiendo la punta del ataque y demandando protagonismo en la finalización, el acompañamiento que tengan a su alrededor cobra un gran peso para que les sea más o menos sencillo marcar. La plantilla es amplia para tomar decisiones respecto al once, pero no solo en los titulares se concentra todo. El papel de los jugadores del banquillo también cobra su importancia.
Facundo Torres (2000) se erigió como uno de los nombres propios de su selección en el encuentro ante La Roja. El impacto que tuvo sobre el verde de Cuiabá fue grande. El joven atacante de Peñarol ingresó al terreno de juego en el minuto 60 por De Arrascaeta, y con el marcador en contra, lejos de achicarse ante sus rivales se envalentonó para ayudar a su selección a conseguir el empate que acabaría predominando al final del partido.
La importancia de tener buenos revulsivos se puso de manifiesto en Uruguay. Atrevimiento, riesgo y decisión fueron ingredientes para que este futbolista acercara a su selección al gol. No le hizo falta contactar mucho con la pelota para trascender cuando llegaba a sus botas, aunque él buscaba el esférico. Facu Torres dejó escrito su nombre en la segunda fecha para los charrúas, y además ensalzó el papel del banquillo. Algo que, por otra parte, podría acabar siendo diferencial en la Copa América.