El fiscal del Lava Jato en Perú pidió la prisión preventiva de Keiko Fujimori por lavado de dinero
La candidata presidencial es acusada de recibir dinero ilegal de la constructora brasileña Odebrecht para sus campañas de 2011 y 2016 y de haberse reunido indebidamente con un testigo del caso
El procurador solicitó, en un oficio al Cuarto Juzgado de Crimen Organizado, “que se revoque la comparecencia con restricciones [libertad condicional] y se dicte nuevamente prisión preventiva contra la acusada Keiko Fujimori Higuchi”, quien disputa la presidencia de Perú con el candidato izquierdista Pedro Castillo, que tiene una ligera ventaja en el escrutinio.
En el documento enviado al juez Víctor Zúñiga Urday, el fiscal, miembro del equipo especial Lava Jato, sostiene que la postulante a la Presidencia por el partido Fuerza Popular ha incumplido las reglas jurídicas impuestas mientras se la investiga por un delito de lavado de activos, como la de comunicarse con testigos vinculados al caso de los presuntos aportes ilícitos a sus campañas de 2011 y 2016.
“Se ha determinado nuevamente que la acusada Fujimori Higuchi incumple con la restricción de no comunicarse con los testigos; pues, se ha advertido como hecho público y notorio que se comunica con el testigo Miguel Torres Morales”, argumentó el fiscal, cuya solicitud debe ser decidida por el Juzgado.
Fujimori, de 46 años, que disputa la presidencia de Perú con el candidato izquierdista Pedro Castillo, se presentó el miércoles en la noche en una rueda de prensa en Lima para pedir al Tribunal Electoral la nulidad de 802 actas -unos 200.000 votos-, donde estuvo acompañada de Torres Morales, en calidad de asesor.
Castillo tiene una ligera ventaja en el conteo oficial de 50,2% contra 49,7% para Fujimori, con 99,1% de las actas escrutadas.
Debido a que no ha sido condenada, la candidata pudo postular en las elecciones pese a estar investigada por recibir presuntamente dinero ilegal de la constructora brasileña Odebrecht para sus campañas de 2011 y 2016, cargos que ella niega.
La candidata, que debe ir a juicio por este caso si no gana la presidencia, permaneció 16 meses en prisión preventiva, hasta mayo de 2020. Enfrenta más de 30 años de cárcel.
En virtud de la “comparecencia vigilada”, en mayo la justicia peruana impidió que la hija del encarcelado ex presidente Alberto Fujimori viajara a Ecuador para asistir a un encuentro político al que la había invitado el premio Nobel peruano Mario Vargas Llosa, que apoya su candidatura.