Crece la tensión entre Bielorrusia y la UE: Lukashenko suspendió la participación en la Asociación Oriental del bloque europeo
Minsk anunció su distanciamiento del espacio de acercamiento entre la UE y las ex repúblicas soviéticas en protesta a las recientes sanciones impuestas por Bruselas
“No podemos cumplir nuestras obligaciones correspondientes a este acuerdo en el contexto de sanciones y restricciones impuestas por la UE”, indicó el ministerio bielorruso de Relaciones Exteriores en un comunicado en el que anunció además que su embajador en Bruselas fue llamado a “consultas”. Agregó también que comenzó a “aplicar el procedimiento de suspensión”.
Les europeos aumentaron las medidas de presión contra Bielorrusia tras la represión de un vasto movimiento de protesta desencadenado por la reelección en agosto de 2020, considerada fraudulenta, del presidente Alexander Lukashenko.
El ministerio bielorruso también “invitó” al jefe de la delegación europea en Bielorrusia a regresar a Bruselas para “transmitir a sus dirigentes el carácter inaceptable de las presiones y sanciones”.
Según el régimen de Bielorrusia, la suspensión de la Asociación Oriental, lanzada en 2009 con seis países, “afectará negativamente la interacción con la Unión Europea en el campo de la lucha contra la inmigración ilegal y el crimen organizado”.
A los responsables europeos que participaron en la elaboración de las sanciones contra Bielorrusia se les prohibirá el ingreso a su territorio, según la misma fuente.
Estas represalias bielorrusas se dan después de la nueva tanda de sanciones económicas e individuales adoptadas por los europeos y que entraron en vigor la semana pasada.
Las sanciones europeas fueron adoptadas en respuesta a la intercepción el 23 de mayo por parte del gobierno bielorruso de un avión comercial de Ryanair que sobrevolaba el territorio bielorruso y la detención de dos pasajeros, el periodista opositor Roman Protasévich y su pareja rusa, Sofia Sapega.
El presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, consideró este lunes un “paso atrás” la decisión de Bielorrusia de suspender su participación en el programa de Asociación Oriental. “Bielorrusia ha dado hoy otro paso atrás al suspender su participación en la Asociación Oriental”, tuiteó el presidente del Consejo, que representa a los países de la Unión Europea.
Esta medida, según Michel, “aumentará las tensiones y tendrá un claro impacto negativo en el pueblo bielorruso al privarle de las oportunidades que ofrece nuestra cooperación”.
Por eso, el político belga lanzó dos mensajes: uno dirigido al pueblo bielorruso y otro al régimen de Lukashenko.
“Al pueblo de Bielorrusia: podéis contar con la UE. Estamos a vuestro lado en solidaridad y con apoyo práctico”, indicó Michel, y le recordó su “derecho” a elegir a su “presidente mediante nuevas elecciones libres y justas”.
Y “al régimen del presidente Lukashenko: poned el futuro de Bielorrusia en primer lugar”, concluyó el presidente del Consejo.
El Consejo de la Unión Europea impuso el jueves pasado sanciones económicas a Bielorrusia ante la escalada de las violaciones de los derechos humanos y la represión violenta de la sociedad civil, la oposición democrática y la prensa.
Las sanciones incluyen la restricción del comercio de productos del petróleo, potasa y bienes empleados en la fabricación de productos del tabaco. Por su parte, la semana pasada Lukashenko sostuvo que está listo para introducir la ley marcial en Bielorrusia ante las sanciones de la Unión Europea a la economía de la antigua república soviética.
“No debe haber ningún hundimiento (económico) en ninguna empresa. Aplicaremos la ley marcial si es necesario”, afirmó el mandatario durante un viaje a la región de Grodno ante las posibles consecuencias económicas de las sanciones sectoriales.
Según Lukashenko, la economía bielorrusa no debería sufrir las restricciones de la UE, por lo que instó a buscar nuevas formas de diversificar la economía: “Debemos demostrar a estos sinvergüenzas del otro lado de la frontera que sus sanciones hablan de su impotencia. Y lo haremos”.
Bielorrusia formaba parte del programa de la Asociación Oriental con la UE, que también integran Ucrania, Georgia, Armenia, Azerbaiyán y Moldavia, desde su creación en 2009.
La Unión Europea ha apoyado las protestas pacíficas de la oposición contra el fraude en las elecciones presidenciales de agosto de 2020 y, desde entonces, ha demandado su repetición y la liberación de los presos políticos.