COVID-19: una científica explicó el prejuicio que impidió sospechar antes del laboratorio de Wuhan
Alina Chan explicó que, al principio de la pandemia, “era aterrador” ser asociado con los dichos del ex presidente de EEUU, y que por eso muchos de sus colegas prefirieron guardar silencio sobre esa hipótesis
Alina Chan forma parte del grupo de los 18 expertos que firmaron una carta en mayo pidiendo una exploración exhaustiva de los orígenes de la pandemia de coronavirus. Aunque Chan expresó su apoyo a una investigación sobre la posibilidad de una filtración en el laboratorio al comienzo de la pandemia, le dijo a NBC que los expertos fueron cuidadosos de no inclinarse demasiado hacia puntos de vista vinculados al ex presidente.
“En ese momento, era aterrador estar asociado con Trump y convertirse en una herramienta para los racistas, por lo que la gente no quería pedir públicamente una investigación sobre los orígenes del laboratorio”, dijo.
La teoría de la fuga del laboratorio, que plantea la hipótesis de que el nuevo coronavirus se filtró accidentalmente del Instituto de Virología de Wuhan, ha ganado terreno en las últimas semanas.
La evidencia circunstancial -incluido un informe del Wall Street Journal sobre tres investigadores del laboratorio de Wuhan que se enfermaron en noviembre de 2019- desafía la teoría aceptada de que el virus mutó de los animales a los humanos de forma natural.
Esto ha llevado al presidente Joe Biden y a otros líderes mundiales a pedir más investigaciones.
Chan había pedido una investigación a principios de 2020 sobre los orígenes del virus y publicado un artículo en el que sugería que el SARS-CoV-2 había “desarrollado varias adaptaciones ventajosas para la transmisión humana” en el momento en que se detectó por primera vez.
Chan siempre advirtió, sin embargo, que a pesar del surgimiento de los pedidos para que se hagan nuevas investigaciones, no hay por el momento evidencia que pruebe definitivamente la teoría de la fuga de laboratorio.
“Se que mucha gente quiere tener una pistola humeante”, dijo Chan a NBC. “Pero este caso es más como migas de pan en todas partes, y no siempre van en una dirección”, dijo, sobre lo complejo de la investigación.
La experta, acreditada por Harvard y el MIT, cree que la carta de la que participó el mes pasado abrió la puerta para que otros científicos se alejaran de los temores de culpabilidad por asociación, y agregó que podría ofrecer credibilidad a teorías alternativas.
“Creo que tuvo un gran efecto”, dijo Chan a NBC. “Creo que, literalmente, ayudó a todas las personas que querían investigar esto al decir: esto no es falso. Los principales científicos creen que esto es plausible”.
En efecto, más científicos se sienten cómodos ante la gama de teorías disponibles, particularmente dada la opacidad de China sobre el tema, aunque aún advierten que considerar la idea de una fuga de laboratorio requiere una prueba científica clara, que por ahora no se ha materializado.