Nueva escalada en Nagorno Karabaj: Armenia denunció una incursión de las tropas azerbaiyanas a través de la frontera sur
Nikol Pashinyan, primer ministro armenio, acusó a Bakú de intentar “sitiar” el lago Sev, ubicado en el límite entre ambos países, con la presencia de un centenar de militares: “Tienen mapas falsos con los que quieren argumentar que se encuentran en territorio azerbaiyano”
De acuerdo a lo consignado por Diario Armenia, un centenar de soldados azerbaiyanos avanzaron sobre el territorio armenio “con un mapa antiguo” y “comenzaron a preparar trincheras para ocupar parte de esa región”.
Nikol Pashinyan, primer ministro armenio, convocó una reunión de emergencia de su Consejo de Seguridad, en la que detalló que las tropas estaban tratando de “sitiar” el lago Sev (Lago negro), ubicado en la nueva frontera entre Armenia y Azerbaiyán, surgida tras la pérdida por parte de Armenia del 70% de los territorios que controlaba en la disputada región de Nagorno Karabaj.
“Es una invasión del territorio soberano de la República de Armenia. Es una provocación planificada, tienen unos mapas falsos con los que quieren argumentar que se encuentran en territorio azerbaiyano”, denunció el mandatario.
Ante esta situación, las fuerzas armenias respondieron “con maniobras tácticas adecuadas”. Sin embargo, Pashinyan sostuvo que las últimas tensiones deben resolverse mediante negociaciones para evitar una escalada mayor.
“Estamos ante una crisis que puede desarrollarse por diversas formas, pero nuestra tarea consiste en garantizar la inviolabilidad del territorio soberano de Armenia”, remarcó.
“Las fuerzas armadas azerbaiyanas intentaron realizar actividades en una de las zonas fronterizas de la provincia de Syunik con el pretexto de ‘ajustes fronterizos’. El Ejército azerbaiyano detuvo la actividad después de que la parte armenia tomara medidas. Se están llevando a cabo negociaciones para resolver la situación”, reportó el Ministerio de Defensa armenio, que al mismo tiempo aseguró que no se produjeron enfrentamientos entre las tropas de ambos países.
Esas negociaciones se desarrollan con la mediación de Rusia, que luego del conflicto de Nagorno Karabaj desplegó en la región unas “fuerzas de paz”. Ara Ayvazyan, ministro interino de Relaciones Exteriores de Armenia, mantuvo una conversación telefónica con su homólogo ruso, Sergei Lavrov, para hablar sobre lo ocurrido.
“Ayvazyan informó a su homólogo sobre el reciente incidente en la frontera estatal de Armenia y señaló la inadmisibilidad de tales provocaciones por parte de Azerbaiyán. Ambas partes acordaron la plena implementación de los acuerdos alcanzados sobre seguridad, estabilidad y estabilidad regionales para evitar la escalada de la situación”, informó la Cancillería armenia.
Emmanuel Macron, presidente de Francia, se pronunció sobre el incidente y reiteró su respaldo a Armenia: “Las fuerzas armadas de Azerbaiyán han cruzado el territorio armenio. Deben retirarse inmediatamente. Vuelvo a decir al pueblo armenio: Francia se solidariza con vosotros y seguirá haciéndolo”.
Estados Unidos, uno de los tres países del llamado Grupo de Minsk que lidera la diplomacia sobre Nagorno-Karabaj, sostuvo que está “siguiendo de cerca” el aumento de las tensiones. “Entendemos que la comunicación entre las partes está en curso e instamos a la moderación para desescalar la situación de forma pacífica”, escribió en sus redes sociales Ned Price, portavoz del Departamento de Estado.
El incidente de esta semana representa una nueva escalada del conflicto entre Armenia y Azerbaiyán, que el año pasado entraron en guerra por la región escindida de Nagorno-Karabaj. El conflicto, que duró seis semanas, se cobró unas 6.000 vidas y terminó con la cesión por parte de Armenia de franjas de territorio que había controlado durante décadas.
En ese entonces, Moscú negoció un acuerdo de paz entre las partes, pero las tensiones persisten. De hecho, el mes pasado Ereván y Bakú se acusaron de abrir fuego en Karabaj y a lo largo de su frontera común.
Pashinyan ha estado sometido a una gran presión por su gestión del conflicto. Ante la creciente presión, el primer ministro dimitió en abril, pero se quedó en calidad de interino, preparando el terreno para las elecciones parlamentarias del 20 de junio, cuyo objetivo es desactivar la crisis política en el país.
Lo sucedido en las últimas horas le valió nuevos cuestionamientos por parte de la oposición. “El ataque del enemigo contra el territorio soberano de Armenia fue posible gracias a la excepcional incompetencia y debilidad de las autoridades en ejercicio”, opinó Ishkhan Saghatelyan, miembro del Cuerpo Supremo de la Federación Revolucionaria Armenia (FRA – Tashnagtsutiún), y flamante candidato opositor.
“Quizás las fuerzas enemigas estén tratando de sacar todo lo que puedan de estas autoridades, ya que entienden que Armenia pronto tendrá un gobierno fuerte y nacional (…) Al Ejército armenio le recuerdo que el pueblo armenio está con ellos y apoyará plenamente todas las acciones para la defensa de la patria”, agregó.
Los separatistas de etnia armenia declararon la independencia de la región azerbaiyana de Nagorno-Karabaj y se hicieron con el control del enclave montañoso en una brutal guerra en la década de 1990 que dejó decenas de miles de muertos y obligó a cientos de miles a abandonar sus hogares.