El City acaricia la Premier

Si el Liverpool gana este domingo al Manchester United, segundo en la tabla, el equipo de Pep Guardiola será campeón de forma matemática.

Álvaro de Grado
As
El Manchester City ya huele la Premier League, está un poco más cerca. Si el Liverpool gana este domingo al Manchester United, segundo en la tabla, el equipo de Pep Guardiola será campeón de forma matemática. Y si no sucediera así, será unos días más tarde. Es cuestión de tiempo que la clasificación dicte de forma definitiva e irrefutable que los citizens han vuelto a ser el mejor equipo de la temporada en Inglaterra, la tercera vez que sucede en los últimos cuatro años.


El triunfo por 0-2 contra el Crystal Palace se logró en la segunda mitad y habiendo permitido descanso a la alineación titular que se jugará la clasificación para la final de la Champions. Una plantilla tiene que ser extensa para competir por todos los títulos y así lo ha demostrado este Manchester City. De la alineación que Guardiola sacó en Selhurst Park había ocho cambios con respecto a los titulares que disputaron la ida del PSG.

Sólo Ederson, Cancelo y Rodrigo repitieron de inicio cuatro días después, haciendo evidente la división entre titulares y suplentes. La compresión del calendario y el factor decisivo del encuentro del próximo martes obligó al técnico catalán a rotar el once, donde incluyó a varios futbolistas con un punto por demostrar: Sterling, Agüero o Gabriel Jesus han pasado a un plano secundario en los planes del Manchester City en este final de temporada, el primero por la explosión de Foden y los dos delanteros por la ausencia de un nueve fijo en el esquema ideal de Guardiola. Sin embargo, todos ellos tiraron del carro en Londres.

Gabriel Jesus marcó un gol en el primer tiempo pero fue anulado por fuera de juego. Tanto él como el Kun se repartieron los espacios en la referencia del ataque, mientras que Sterling también participaba por dentro para dejarle toda la banda izquierda a Mendy. De hecho, fue Agüero quien abrió la lata al recoger un balón del lateral francés y rematar a bote pronto: su segundo gol en esta liga, el cuarto en total en este curso, señal inequívoca de lo complicado que está siendo su último año en el Manchester City.

En la banda derecha, el protagonismo recayó sobre Ferran Torres, que a pesar de sus 10 goles en esta temporada se ha quedado fuera de los últimos partidos importantes (no ha disputado ningún minuto en Champions desde la ida de los octavos de final). El español chutó con la izquierda para hacer el 0-2 y anotar así el gol 700 de la era Pep Guardiola (288 partidos).

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