Cristal cae goleado pero clasifica a la Copa Sudamericana
Sao Paulo aplastó a Sporting Cristal sin despeinarse. A pesar del resultado, la victoria de Racing clasifica a los rimenses a la Copa Sudamericana.
Para utilizar uno de los términos favoritos de Roberto Mosquera en esta fracasada experiencia en la Copa Libertadores, Cristal nunca compitió. El técnico planteó un esquema defensivo, con cinco hombres atrás, le cedió el balón a su rival, pero nunca logró contragolpear con peligro. Los celestes no consiguieron en ningún momento del partido hilar varios pases seguidos y sufrieron toda la noche frente a un rival de otra categoría.
Sao Paulo pegó primero con un buen cabezazo de Bruno Alves después de un córner bien tirado por Hernanes. La marca en el balón parado sigue siendo una de las grandes deudas del equipo peruano, muy desorganizado y desatento a la hora de saltar a cabecear en defensa. Esta vez el culpable fue Omar Merlo, pero, a lo largo del encuentro, hubo muy pocos duelos ganados por vía aérea.
El cuadro de Hernán Crespo, plagado de suplentes, controló a placer la pelota y el ritmo del encuentro. Cuando decidió pisar el acelerador, siempre le generó problemas a una defensa de cinco incapaz de contener los ataques, de mantener la forma, de conservar cierto orden. Simplemente, no estuvo a la altura.
En la segunda parte, el equipo local se desató y se aprovechó de la inmensa cantidad de errores cometidos por la defensa y el mediocampo de Cristal. Después de varios cabezazos que pusieron en aprietos a un buen Alejandro Duarte, y de un mano a mano que salvó el portero peruano, Joao Rojas y, tres minutos después, Vitor Bueno, sentenciaron un encuentro que nunca estuvo en discusión.
A pesar de una nueva pésima presentación del equipo peruano y de una nueva derrota holgada en una muy mala campaña de fase de grupos, Cristal logra clasificar a la Copa Sudamericana gracias a la derrota de Rentistas. El triunfo en Lima frente a los uruguayos vale mucho y servirá para maquillar el fracaso en la Libertadores, aunque no salvará a Mosquera y sus pupilos de unas críticas muy merecidas.