Cómo cayeron en Boca los positivos de River
Tras los casos de Covid en La Banda, Miguel Russo puso en marcha su estrategia...
Casi que la noticia de que un grupo importante de jugadores de River había dado positivo de coronavirus a horas del superclásico se supo primero en Casa Amarilla que en Núñez. La bomba explotó cerca del mediodía mientras Miguel Russo terminaba el ensayó táctico del cual, por ejemplo, participó de titular Edwin Cardona. Y allí, en ese preciso momento, el técnico de Boca comenzó aplicarles la vacuna a sus jugadores: "Acá no se relaja nadie, ni en pedo", fue el mensaje de aliento que pululó en el hotel Intercontinental donde se concentró el plantel de cara al Súper.
"El pasado inmediato de estos futbolistas con River es muy fuerte, ni hablar de los dos capitanes y las vivencias recientes que tienen en los superclásicos", explicaron desde Casa Amarilla el sentimiento de Carlos Tevez y Carlos Izquierdoz, por ejemplo, y aclararon que ninguno de los dos "va a permitir que nadie del plantel se relaje". Y mucho menos Russo, si incluso a Olé le dijeron, a modo de broma, que "ni siquiera les habrá dejado dormir la siesta a los jugadores" haciendo referencia a la manera en la que el entrenador se tomó la noticia de River.
Para todo Boca es muy importante el partido de esta tarde con River. Partiendo de la cuenta pendiente que tienen estos jugadores cada vez que se enfrentaron al equipo de Marcelo Gallardo, pasando por la mala racha de Russo con el Millonario (de las cuatro veces que lo enfrentó como DT no le pudo ganar nunca) y su posición en el banco del Xeneize luego del traspié en la Copa con Santos, y hasta la presencia de Juan Román Riquelme como vicepresidente del club (desde que asumió lleva dos empates en superclásicos) y el mensaje/presión que le dejó el viernes al plantel: "Denle una alegría a la gente".
Nadie mejor que Boca para interpretar y sentir lo que atraviesan los jugadores de River. Claro, sucede que al Xeneize le tocó vivir en carne viva lo que significa un rebrote de esta magnitud puertas adentro: fue en septiembre del año pasado, justo antes de volver a jugar por Copa Libertadores, cuando el plantel de Russo tuvo nada menos que ¡25 jugadores contagiados! Si de hecho, y junto con Flamengo, fueron de los primeros clubes en tener contagios masivos en sus planteles.
En definitiva, y en la cabeza de Russo, Boca va a enfrentar al River de Gallardo. No al River con bajas por contagiados, ni al River a media máquina ni al River desmadrado por el Covid. Es River y punto. "Se va a hacer todo como estaba pensando desde antes de que se supiera la noticia, no cambia nada. De hecho, hasta puede existir más tensión que antes", siguieron con la explicación desde el hotel Intercontinental.
Justamente por esa "tensión" es que apenas se conoció lo que pasaba en River, el DT de Boca estuvo constantemente encima de sus jugadores, al igual que lo hicieron los referentes y ni hablar el capitán e ídolo, Carlos Tevez. Por lo visto, y si bien "cayó como una bomba", en Boca le dan poca importancia a los contagios de River. Igual, por las dudas, el DT ya inyectó a todos con la vacuna Russo.
