Barça-Neymar, debate abierto
Neymar termina contrato en 2022 y, de estar intercambiándose documentos para firmar la renovación, se ha pasado a un nuevo escenario en el que, como en 2019, el Barça se cree con posibilidades de conseguir su regreso. Pese a ser un personaje tremendamente controvertido dentro y fuera del campo, Joan Laporta cree que su fichaje tendría un triple efecto positivo. Primero, aumentaría de nuevo el valor de marca del Barça. Segundo, subiría el nivel de una plantilla a la que Koeman ha devuelto valor y vigor con la entrada de jóvenes como Araújo, Mingueza, Dest o Pedri. Y tercero, le haría un guiño inmejorable a Messi, que sueña con reencontrarse con el brasileño desde su marcha en 2017. Por su regreso, la plantilla le planteó incluso a Bartomeu la posibilidad de bajarse el sueldo. Señal de que en el vestuario Neymar sigue siendo un personaje muy querido.
El Barça estima que, se hace bien los deberes con las ventas las ventas, podría llegar a tener hasta 100 millones de euros para fichar según informó la pasada semana La Vanguardia. Joan Laporta se reunió el pasado 3 de marzo, antes incluso de ser presidente, con Pini Zahavi. David Alaba era uno de los nombres que estuvieron encima de la mesa. Pero también Neymar. Zahavi fue el representante que, junto al padre de Neymar, tejió su fuga al PSG. Hablaron de futuro. Neymar siempre ha tenido en la cabeza volver a Barcelona. No está tan desesperado, sin duda, como en 2019, donde no soportaba una ciudad, París ,que además le estaba haciendo daño personalmente. Pero ya ha dicho públicamente que, "como fuera", tenía que jugar con Messi la próxima temporada. Y si Messi termina renovando...
Se abre, pues, una nueva temporada de la serie "Neymar". Su regreso no parece sencillo. Aunque termine contrato, el PSG es un club orgulloso y no pondrá fácil su salida, menos si Mbappé vuela a Madrid. Se quedaría sin jugadores de referencia. Pero Neymar también puede apretar, y un año de un jugador a disgusto no es buen negocio.
Finalmente, quedaría por resolver el impacto social del regreso de Neymar. Para un porcentaje del barcelonismo, el equipo perdió sonrisa y fútbol sin él. Llenaba campos, llenaba los ojos y su rendimiento deportivo fue indiscutible. Fue uno de los grandes protagonistas del triplete de 2015 entre otros éxitos. Para otro porcentaje, incluso tal vez mayor, su marcha sin previo aviso fue imperdonable. Tanto como el juego de demandas con el club, que finalmente no le salió bien porque una sentencia judicial le obligó a pagar 6,7 millones de euros. Queda pendiente, sin embargo, el caso Neymar 2. El brasileño es "responsable" de la primera condena oficial en la historia del Barça, que como club admitió dos delitos fiscales. El debate está abierto. O mejor dicho, sigue abierto.